La Cámara de Casación porteña ratificó la responsabilidad del ex futbolista Jonathan Fabbro por los delitos de “abuso sexual agravado por haber mediado acceso carnal reiterado en cinco hechos” contra una sobrina menor de edad, pero abrió una instancia para revisar el monto de la condena, de 16 años de cárcel que ya está cumpliendo.

Los jueces Gustavo Bruzzone y Pablo Jantus rechazaron las apelaciones presentadas por la defensa de Fabbro, así como las de la querella, que pretendía que la condena se elevara a 40 años de prisión.

No obstante, el tribunal resolvió sobre el “agravio por el monto de pena impuesto a Jonathan Fabbro, sin abrir juicio sobre el fondo del asunto, el recurso de casación deberá ser analizado por una sala de fondo”.

Ello –añade el fallo- “a fin de garantizar una revisión amplia de la imposición de pena, tras la sentencia de condena”.

“Corresponde remitir el caso a la Oficina Judicial de esta Cámara para que lo asigne a una sala del tribunal” para la revisión del monto de la condena.

LEE: Encontraron el cuerpo de Eliana Pacheco en un descampado de La Plata

En 2019, un tribunal oral condenó a Fabbro a 14 años de prisión pero tras una primera intervención de la Cámara de Casación la pena fue aumentada en dos años por la inclusión de nuevas agravantes de su conducta.

Ese fallo fue nuevamente apelado y ahora el tribunal penal ratificó la responsabilidad pero abrió la revisión sobre los 16 años aplicados al ex jugador de Boca Juniors y River Plate, entre otros equipos locales y de América.

La querella, a cargo del abogado Gastón Marano (quien también asiste al jefe de “Los Copitos”, Gabriel Carrizo, en la causa por el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner) había argumentado que la pena debía incrementarse por “la reiteración de abusos y el sostenimiento en el tiempo; las consecuencias en la vida de la niña que se ha visto trastocada; y el rol de Fabbro como tío y padrino”.

La víctima era ahijada del futbolista y, según estableció el fallo, sufrió los abusos en al menos cinco ocasiones entre los seis y los 11 años de edad.

El fallo consolida la condena por el delito de “abuso sexual agravado por haber mediado acceso carnal reiterado en cinco hechos, en concurso real–, uno de ellos agravado por estar el imputado encargado de la guarda de la damnificada, en concurso ideal con el de promoción a la corrupción de un menor de edad, agravado por la minoría de trece años de la víctima”.

Fabbro siempre proclamó su inocencia y atribuyó la acusación en su contra a una manipulación por parte de un hermano, motivada en intereses económicos.