Procesaron al asesino de la policía en la Estación Retiro del Subte pero le harán un peritaje psiquiátrico

El hombre que asesinó a balazos a una policía de la Ciudad en la Estación Retiro del Subte fue procesado con prisión preventiva por “homicidio doblemente agravado”, pero será sometido a una junta médica psiquiátrica para determinar “si tuvo capacidad para comprender la criminalidad del acto y dirigir sus acciones”.

El acusado fue identificado como Oscar Gustavo Valdez y fue procesado por el homicidio de la policía Maribel Nélida Zalazar el 14 de febrero pasado.

El procesamiento fue dispuesto por el juez de instrucción Martín Peluso, quien además le trabó un embargo por 50 millones de pesos.

El juez reconoció “la necesidad de abordar con detenimiento el aspecto médico del evaluado” ante la posibilidad de que padeciera alguna patología exculpatoria.

Pero subrayó que “no se ha agregado a la investigación, de momento, ningún elemento objetivo que permita sostener, de manera categórica, que Oscar Gustavo Valdez se encontraba afectado por alguna causal de inculpabilidad”.

En virtud de ello y de los plazos procesales, dispuso el procesamiento con prisión preventiva y ordenó los peritajes.

Sobre la mecánica del hecho, el procesamiento –de 54 páginas, al que tuvo acceso NA-  explicó que Valdez se quejaba en la estación Retiro del Subte de un intenso dolor en una pierna que su pareja en ese momento, identificada como Evelyn Morobach Cabrera, atribuyó a que “se había caído de la escalera en la estación Diagonal Norte”.

Valdez “lloraba de dolor, transpiraba y tenía el cuerpo caliente, como si tuviera fiebre. En todo momento, se dirigía a su pareja llorando, refiriéndole frases tales como ‘Perdón mi amor, yo no quería hacer esto’, mientras la sujetaba de los brazos y se apoyaba en ella”, relata la resolución.

La policía Maribel Zalazar fue convocada ante la supuesta lesión de Valdez: “Este chico tiene quebrada la cadera”, dijo, y pidió que acercaran una camilla  “para recostarlo en el suelo y así poder brindarle la asistencia médica que pudiera requerir”.

En ese momento, Valdez “de manera intempestiva se agachó -en dirección hacia el cuerpo de Zalazar-apoderándose del arma reglamentaria que aquella portaba en la pistolera del correaje de su uniforme  y, sin mediar palabra, le quitó el seguro al arma, tiró la corredera hacia atrás y con el fin de quitarle la vida a la funcionaria policial efectuó dos disparos”.

“Zalazar se desplomó sobre el imputado” y éste le disparó a otro de los que intentaban ayudarlo, a quien hirió en un glúteo, exhibiendo “un asombroso cambio de actitud corporal y fortaleza física que hasta ese entonces parecía disminuida”.

En su declaración indagatoria, Valdez sólo dijo: “Quiero saber si mis hijos están bien, allá en su casa y si Evelyn está con ellos. Quiero que estén bien todos. Solo quiero decir eso”, pero al interrogarlo sobre “si le disparó a alguien, respondió que: ‘sí, al que tenía a mi hijo. Al que estaba por matar a mi hijo. No lo quería ver así a mi hijo, por eso hice eso. Porque el tipo, el boliviano tenía a mi hijo, dañándolo, lo tenía mal, como un juguete y como no soportaba ver así a mi hijo, por eso hice eso”.

Pese a la confusa declaración, que pareció referir a un hecho desconocido, el juez Peluso sostuvo que “el pretendido escenario que habría desencadenado esa reacción desmedida y absolutamente injustificada (imposibilidad de ver a sus hijos) fue descartado de plano a través de la declaración de la madre de los niños”.

Valdez tenía antecedentes de consumo excesivo de alcohol y drogas, así como de violencia doméstica, pues una ex pareja “hizo referencia a situaciones de agresión física sufridas durante la relación y que luego de asistir a distintos talleres sobre violencia de género, pudo tomar real conciencia de la situación en la que se hallaba inmersa, tomando la decisión de separarse de Valdez a finales del año 2021”.

El juez dispuso la evaluación médica para determinar si Valdez “posee capacidad para estar en juicio y si sus facultades mentales encuadran dentro de la normalidad”.

“La experticia ordenada deberá completarse con una evaluación exhaustiva del causante de manera presencial, en la fecha y hora que el organismo pericial fijará a tal efecto”, resume la resolución