En la actualidad, San Valentín es una fecha para celebrar el amor. A través de regalos, chocolates, flores y salidas, las parejas festejan este día. Y aunque hay una cierta grieta entre los que opinan que es una fecha comercial y los que no, lo cierto es que sigue ganando terreno y no se ha dejado de celebrar desde sus inicios.

Pero, ¿cómo comenzó realmente este día? Si bien ahora todo parece “color de rosas”, su origen no fue tan así. Un recorrido por su oscura y retorcida historia.

La fiesta de la Lupercalia

Fiesta de la Lupercalia.

Este antiguo festival romano fue uno de los primeros registros del Día de San Valentín. El evento se llevaba a cabo los 15 de febrero.

Éste había comenzaba con los tradicionales sacrificios a una cabra y un perro, en el que un grupo de sacerdotes -llamado Luperci- les cortaba un trozo de piel a los dos animales para ponérselo en la frente y luego, golpearlo contra todas las mujeres que se encontraban en el lugar. La idea de este festival era ayudar a las mujeres a que sean más fértiles.

A finales del siglo V, el papa Gelasio I reemplazó la Lupercalia por el Día de San Valentín y eliminó los sacrificios.

¿Quién fue la inspiración de esta festividad?

San Valentín de Terni.

Uno de los rumores sobre su origen se centra en que dos santos llamados Valentín habían sido la musa para crear esta fecha.

En cuanto al primero, la historia tiene lugar durante el tiempo en el que gobernaba el emperador romano Claudius II Gothicus. Allí, un Valentín había sido procesado por el gobernante mencionado tras haberse negado a adorar a los dioses romanos.

Mientras estaba en prisión, el hombre en cuestión firmó una carta que decía “de tu Valentín” a una mujer a la que curó de una ceguera. Se cree que esta festividad podría estar inspirada en él por su amabilidad y amor.

A su vez, un sacerdote llamado San Valentín de Terni también hizo historia al casar en secreto a una pareja de jóvenes enamorados, en contra de las órdenes del emperador Gothicus. El gobernante creía que los hombres solteros eran mejores soldados, ya que, como no tenían nada para amar, no tenían nada para perder.

Al enterarse de esto, Gothicus lo ejecutó el 14 de febrero (alrededor del año 269 d. C.). Su muerte se la recuerda como un día de amor, por haber pecado por un hecho romántico.

Actualmente, es una de las fechas más importantes en el mundo y es un gran negocio que hace ganar miles de millones de dólares cada año por la tradición de hacer regalos (como rosas rojas y chocolates) o festejarlo a través de salidas y escapadas turísticas, entre otras opciones.