Muerte de la modelo brasileña en Retiro: dejarán de monitorear con tobillera electrónica a Sáenz Valenti
Emmily Rodrigues falleció el 30 de marzo al caer de un sexto piso.
La Justicia determinó hoy que dejará de monitorear con tobillera electrónica al empresario Francisco Sáenz Valiente, el hombre investigado por la muerte de la modelo brasileña Emmily Rodrigues que cayó de un sexto piso en el barrio porteño de Retiro.
De este modo lo dictaminó el juez en lo criminal y correccional porteño Luis Schelgel, quien ordenó que la tobillera sea devuelta a la Dirección Asistencia de Personas Bajo Vigilancia Electrónica que depende del Ministerio de Justicia de la Nación.
Sin embargo, el fallo señala que las medidas de restricción impuestas se mantendrán vigentes, como la prohibición de salida del país y de acercamiento a los familiares de la damnificada y testigos que prestaron declaración, mientras que tendrá la obligación de comparecer ante el tribunal cada 15 días, ya sea de forma virtual o presencial.
El pedido había sido presentado por los abogados defensores del acusado, Facundo Orazi y Rafael Cúneo Libarona.
Por su parte, el magistrado, antes de tomar la decisión corrió vista al fiscal Santiago Vismara y a la abogada Raquel Hermida Leyenda, patrocinante del padre de Rodrigues, al tiempo que ambos entendieron que Sáenz Valiente debía seguir con la tobillera.
"El fiscal Vismara entendió que lo requerido por la defensa de Sáenz Valiente no debía tener acogida favorable en tanto la colocación de la tobillera electrónica al nombrado resultaba un reaseguro indispensable respecto de las otras restricciones impuestas, sobre las que la defensa no planteó, ni plantea cuestionamiento alguno", dictó la resolución.
El sospechoso se encuentra con falta de mérito, quien en abril de 2023 aseguró que la modelo tuvo el 30 de marzo del año pasado una suerte de brote psicótico luego de consumir drogas en su departamento y de forma voluntaria e impulsiva se arrojó por el balcón al vacío.
Las pericias determinaron que las lesiones de Emmily fueron compatibles con la caída del sexto piso, pero que no tenía aquellas típicas de defensa o resistencia, algo que favorece en la causa al empresario.