Miles de peregrinos se acercaron al santuario de San Expedito
Como todos los años, desde 2004, volvió a recibir a un gran número de peregrinos que concurren al templo Nuestra Señora de Balvanera para pedir y agradecer al patrono de las causas justas y urgentes.
El santuario de San Expedito, ubicado en el barrio porteño de Balvanera, volvió a recibir como todos los años a un gran número de peregrinos que concurren al templo para pedir y agradecer al patrono de las causas justas y urgentes.
Este año, la celebración se realizó bajo el lema “San Expedito, queremos vivir la unidad hoy”, y como ocurre desde el año 2004, cada 19 de abril en la parroquia Nuestra Señora de Balvanera se venera una antigua imagen del santo, por lo que desde el día anterior el templo permanece abierto durante toda la noche para recibir a los fieles y compartir juntos la celebración de la misa a la medianoche.
La misa de la medianoche fue presidida por monseñor José María Baliña, obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario para la zona Centro; mientras que la misa central fue presidida este miércoles al mediodía en la explanada de la parroquia por monseñor Gustavo Oscar Carrara, también obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario pastoral para las Villas de Emergencias.
“San Expedito tenía en su corazón el deseo de seguir a Jesús, quería abrazar el Evangelio de Jesús, seguirlo más de cerca. Por eso San Expedito es el patrono de las causas imposibles, de las causas urgentes y de esas causas que no pueden esperar, tienen que ser hoy”, dijo monseñor Carrara ante los fieles.
Y agregó: “muchas veces recurrimos al santo, no por cosas pequeñas, sino por dolores grandes y por problemas importantes. Ninguno vino acá distraído, sino que trae algo en el corazón y nosotros intuimos que el santo nos escucha con delicadeza, nos escucha con cariño, es como el oído de Dios ante esas necesidades que nosotros traemos”.
Luego de la misa central, la jornada continua con bendiciones y confesiones en el templo y en el atrio del santuario, y a las 17 se iniciaba la procesión por las calles del barrio, que finalizará a las 18 con una Hora Santa.