María Cash: a cuánto aumentó la recompensa para quien aporte datos de su paradero
La joven está desaparecida desde julio de 2011 cuando fue vista por última vez en Salta. Ahora el Gobierno volvió a incrementar el monto de la recompensa.
A días de que se hayan cumplido 11 años de la desaparición de María Cash, el Gobierno Nacional informó que aumentaron la recompensa a $3 millones para toda persona que de información relevante sobre el paradero de la joven.
El Ministerio de Seguridad, a través de la Resolución 441/2022 del Boletín Oficial, indicó que la recompensa pasó a $3 millones para “aquellas personas que, sin haber intervenido en el hecho delictual, brinden datos útiles que sirvan” para encontrar a la joven que al momento de su desaparición tenía 29 años.
Desde el momento que comenzó la búsqueda hubo diversas versiones sobre el paradero de María, así como también del porqué tomó la decisión de bajarse del micro en el que se trasladaba para finalizar con su viaje al Norte del país.
María desapareció el 8 de julio de 2011 y fue vista por primera vez cuando hacía dedo en la Ruta Nacional 34 para viajar desde Salta a Jujuy. El viaje comenzó cuatro días antes, salió de su casa de Barracas y partió rumbo a Jujuy donde iba a encontrarse con Juan Pablo Dumon, un compañero de yoga, quien aparentemente le iba a dar casa y trabajo.
Pero todo cambió cuando a 200 kilómetros de llegar a destino se bajó del micro y le mandó un mensaje a Dumon diciéndole que no continuó camino porque “no se sentía cómoda”. En ese momento una cámara ubicada sobre la RN 34 la visualizó haciendo dedo y se supo que de esa manera fue hasta Santiago del Estero.
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Allí su amigo le compró un boleto de micro hasta Jujuy. Cuando llegó a destino llamó a la hermana de Dumon para que la fuera a buscar, pero le respuesta que recibió fue “tomate un taxi”. Después se la vio en la entrada de Pampa Blanca de nuevo haciendo dedo y llamó a su familia para decirles que no estaba bien, que se había quedado sin plata.
Se supo que el jueves 7 la joven se había presentado con su DNI en el hospital San Bernardo de Salta y pidió ser atendida porque se sentía mal, pero antes de que el médico la revisara ella se fue.
Algunas personas que se acuerdan haberla visto sostienen que María estaba desorientada, errática, iba y venía sin un destino fijo. Ese mismo 7 de julio pudo ir a un cyber para enviarle un mail a sus hermanos indicándoles que había perdido todo. Al día siguiente hizo dedo antes del peaje AUNOR donde se subió a una camioneta Chevrolet, que la llevó hasta la rotonda General Güemes para luego empalmar con la ruta 34.
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Cuando se bajó volvió a hacer dedo hasta pasar el peaje de Cabeza de Buey de la ruta 34, pero sin dar explicaciones se bajó en el paraje de la Difunta Correa. De inmediato se trasladó a un hospital ubicado en el pasaje Sánchez de Bustamante 233 y desde ese momento nunca más se supo de ella.
Tres años después y en una larga búsqueda por parte de su familia para encontrarla, su papá, Federico Cash, murió en la ruta mientras se dirigía a lo que podía llegar a ser una posible pista.
Actualmente la causa judicial es llevada a cabo por el Juzgado Federal número 2 de la provincia de Salta, a cargo de Miguel Antonio Medina.