Los restos encontrados hundidos a las afueras de la ciudad bonaerense de Necochea el año pasado, son compatibles con los de un submarino, posiblemente alemán, según un dictamen al que arribaron los ingenieros navales Juan Martin Canevaro y Andrés Miguel Cuidet

Ambos trabajaron como peritos de parte del grupo de investigación llamado Eslabón Perdido que encontraron el año pasado restos del navío hundido y realizaron la denuncia de hallazgo ante la Prefectura Naval Argentina en marzo de este año.

Según el informe al que arribaron los peritos, las características de los restos encontrados coinciden con el tipo de embarcaciones que utilizaba la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial, y se investiga se podría tratarse de la huída de distintos jerarcas a la Argentina.

Eslabón Perdido, es una agrupación de voluntarios, coordinada por el investigador Abel Basti, que se creó con el objetivo de encontrar los cascos de submarinos nazis que hacia el final de la Segunda Guerra Mundial llegaron clandestinamente al país y que, tras los desembarcos, fueron hundidos por sus tripulantes para no dejar rastros.

Al informe reciente se llegó luego de analizar fotos y videos subacuáticos de los restos hallados por el grupo de investigación.

LEE: Confirman indemnización por la tragedia de Cromañón pero el sobreviviente aún no puede cobrar

El hallazgo de los restos ocurrió a unos 4,2 kilómetros de distancia de las playas bonaerenses de Costa Bonita y Arenas Verdes, y a unos 28 metros de profundidad.

"Después de una investigación, expertos navales han determinado que los restos son compatibles con los de un submarino y no con los de un barco convencional.
Todavía no estamos en condiciones de decir de donde viene ese submarino. Pero todos nos imaginamos de dónde podría ser”, dijo este martes Carlos Palotta, colaborador de Eslabón Perdido, en declaraciones al programa Arriba Argentinos.

Y agregó que entre los restos había una pieza clave para determinar de qué tipo de embarcación se trataba: “un periscopio”.

En tanto, Abel Basti, líder de la expedición que encontró el submarino indicó que “la pericia argentina dio un primer dictamen respecto a que no es un barco y hay piezas compatibles con un submarino” y que es un submarino, "sino que es un submarino alemán".

"Hay noticias de la época que hablan de un desembarco de jerarcas nazis en la zona. Frente a ese lugar descrito en las crónicas está este submarino hundido”, relató Abasti, quien además sostuvo que en una nave de este tipo "podrían haber viajado unas cincuenta personas".