Los familiares de Emmanuel Soria y Maximiliano Ludvik, los argentinos desaparecidos en Málaga, viajaron para unirse a la búsqueda y en su llegada pidieron el relevamiento de cámaras para confirmar que hayan ido a la playa. 

Lo lograron tras una colecta por redes sociales que duró menos de 24 horas y desde el Aeropuerto de Ezeiza el hermano de Soria agradeció el apoyo: “Seguimos recibiendo ayuda. Es un montón. Agradezco la fuerza y la fe de la gente que nos transmiten”.

Fuentes policiales informaron: “El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional (equipo encargado de las desapariciones en su demarcación) trasladaron las diligencias a sus homólogos de la Policía Judicial de la Guardia Civil. Entre ellas se encontraría la petición que, a través de una ampliación de la denuncia, los familiares hicieron a la Policía Nacional para que se revisen las imágenes de las cámaras de vigilancia de la zona de la Misericordia desde la que salieron los jóvenes por si estas aportaran algo al caso”.

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Durante las últimas horas se confirmó que la Guardia Civil Española asumió la investigación y que sobre la costa de Fuengirola se encontraron dos cadáveres pero aseguran que pertenecen a migrantes magrebíes.

Además, explicaron que el Salvamento Marítimo retomó este miércoles los trabajos que se centraron en la zona costera y en mar adentro. Para la tercera jornada de búsqueda están movilizados la Salvamar Alnitak, una embarcación de Cruz Roja LS Cronos y un medio aéreo. 

Acerca de la tabla de paddle surf que fue hallada, Francisco Soria explicó: "La habían comprado por Internet hacía muy poco tiempo y ninguno de los dos era experto en la práctica del deporte".

Por último, el hermano de Soria se mostró confiado en la investigación: "Los vamos a encontrar. No tenemos dudas. Son excelentes personas".