Por Daniel Dimare (*)

La expansión de las tecnologías y la comunicación (TIC) es parte de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas.

En Argentina el Consejo Federal de Educación (CFE) declaró la educación tecnológica de importancia estratégica en el Sistema Educativo Nacional durante la escolaridad obligatoria. Para ello, el Ministerio de Educación de la Nación establecerá objetivos de aprendizaje para la educación obligatoria en programación y robótica para iniciar el camino de su inclusión formal en las propuestas de enseñanza y aprendizaje en las escuelas de la República Argentina.

En Estados Unidos, organismos como el US National Research Council y la National Science Foundation consideran la ciencia, tecnología, ingeniería y matemática como disciplinas fundamentales para las sociedades tecnológicamente avanzadas, (lo que se ha dado a conocer como el movimiento STEM), y aborda la preocupación de enfocar estas materias en un plan de estudios más integrado que en la actualidad.

En España, programación y robótica ya son asignaturas curriculares en algunas comunidades autónomas y Francia se une al grupo de países que han comenzado a introducir la programación en el currículum.

Beneficios de aprender robótica

En el mundo, el aprendizaje de la robótica sustentado en la programación, ha demostrado ser una excelente herramienta para que los estudiantes logren:

* Dominar las interacciones entre el mundo físico y el virtual.

* Aprender haciendo (Learning By Doing). Existe evidencia científica que participando activamente de desafíos, retos o situaciones reales, el aprendizaje del niño es más efectivo, duradero y genera sensaciones placenteras.

* Estructurar el pensamiento lógico, crítico y computacional (computational thinking). Resolver problemas a través del ordenamiento lógico y análisis de datos e información, creación de soluciones mediante una serie de pasos ordenados (algoritmos) y evaluación y depuración de los resultados.

* Habilidades creativas, de programación y constructivas, habilidades y competencias para el siglo XXI.

* Trabajo en equipo y colaborativo que evita que los estudiantes interactúen solitariamente frente a una PC, smartphone o tablet, asignándoles roles rotativos que fomentan el desarrollo de habilidades relacionadas al liderazgo.

* Familiarización en forma lúdica con las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (NTICs) permitiéndoles automatizar procesos, trabajar y aprender colaborativamente, entre otras.

Que los estudiantes de hoy puedan estudiar robótica y programación significa que adquieren habilidades del siglo XXI, tales como pensamiento computacional, programación, agilidad mental, creatividad, trabajo en equipo, entre otros, que les serán útiles en sus carreras, en sus vidas y en su futuro laboral.

De esta manera, los transforma de simples usuarios de la tecnología a creadores activos.

El desafío para los actores de la educación

Pero toda transformación o incorporación de una nueva tecnología genera dolores, desconocimiento y preocupación por la solución o implementación. Y sino miremos lo que ocurrió con el homeschooling.

La gran pregunta de docentes y directivos de instituciones educativas ahora es:

¿Cómo trabajar con programación y robótica con los alumnos? En Argentina, como en el mundo, editoriales y empresas desarrolladoras de materiales educativos ya están trabajando junto a los colegios "early adopters" para fortalecer las instituciones y generar la próxima revolución educativa, facilitando la implementación de esta nueva materia con la vitalidad necesaria para llegar de forma atractiva a todos los alumnos.

El desafío argentino es generar propuestas pedagógicas y equipamientos locales que permitan igualar las posibilidades de estudiar estos contenidos tecnológicos en todas las aulas del país.

¿Y si la clave pasa por el "edutainment" (educación + entretenimiento)? ¿Y qué mejor que el entretenimiento para capturar la atención de las niñas y los niños? .

Lo innovador será que los alumnos aprenderán en forma simple y amigable, a través de libros escolares como hasta ahora, sumado a plataformas digitales y su complementación física con equipamientos de robótica divertida para generar el "Learning By Doing".

La educación se enfrenta al desafío de incorporar aprendizajes vinculados a estas nuevas habilidades que requiere un mundo cambiante. El camino que debe tomar deberá estar en sintonía con los nuevos intereses de los niños y jóvenes. El juego es un motor que los motiva a vincularse de forma ávida con las nuevas tecnologías. La robótica y la programación serán herramientas claves para estas variables que ya van ganando nuestra realidad de usuarios y permitirá que ellos interpreten y desarrollen lo que este presente nos demanda modificar.

Hadi Partovi en su artículo "Las escuelas deben enseñar el currículo del futuro, no del pasado", afirma: "Nos enfrentamos al desafío de redefinir la educación para adecuarla a las habilidades requeridas para resolver problemas, innovar y tener éxito. Pero, como sociedad, no estamos cumpliendo con ese desafío y, en consecuencia, no preparamos convenientemente a la próxima generación para el futuro". .

Y agrega: "En pleno 2020, la mayoría de las escuelas enseñan las mismas asignaturas que se enseñaban en 1920: lectura, escritura, matemáticas, ciencias, historia e idiomas extranjeros. El debate sobre el futuro de la educación se centra en la transformación de cómo enseñamos, especialmente con la utilización de tecnología dentro del aula, y no en la transformación de qué enseñamos. Cualquier discusión sobre el futuro del trabajo debe ir acompañada de un debate sobre el futuro del currículo escolar".

Y Partovi se pregunta, "¿qué estamos haciendo para preparar a las generaciones futuras para prosperar en este panorama cambiante?".

Considero que en la era del conocimiento, referentes de la educación, editoriales e industriales argentinos tenemos que dar el presente en el aula para revolucionar el futuro de los estudiantes, los docentes y las escuelas. .

Revolucionando la educación, generamos el conocimiento que será la mayor riqueza de nuestro querido país para lograr desarrollo para todos.

(*) Director de Juguetes Rasti.