La prueba que complica a Néstor Soto, el joven que confesó haber matado a la estudiante cordobesa
Está acusado por el homicidio simple. Sin embargo, la carátula de la causa puede cambiar a femicidio.
Un video muestra el trayecto que realizó el auto entre la vivienda de Néstor Soto, el joven que confesó haber matado a Catalina Gutiérrez, la estudiante cordobesa de 21 años, y el lugar donde fue hallado el cuerpo de la influencer.
Las cámaras de seguridad registraron al Renault Clio del presunto femicida a las 22:30 del miércoles pasando por la avenida Valparaíso en la intersección con la calle José Guardado, en la ciudad de Córdoba. Catalina se encontraba en el asiento trasero del vehículo, aunque no se determinó si estaba vida o inconsciente.
En este sentido, la fiscalía, a cargo de José Mana, reconstruyó los hechos y estableció que la víctima arribó a la casa de Soto alrededor de las 21:30. Casi una hora después, el rodado fue abandonado en la calle Pedro Echagüe al 3700, en el barrio Ampliación Kennedy.
La autopsia reveló que la chica murió a causa de asfixia por estrangulamiento y tenía indicios de violencia en varias partes de su cuerpo.
Asimismo, efectivos policiales hallaron un anillo que Catalina habría perdido al querer defenderse y pelos de la influencer en diferentes lugares de la vivienda.
Estas pistas complican a Soto que está detenido por el delito de homicidio simple que tiene una pena va de ocho a 25 años de prisión, según señala el Código Penal.
Por otra parte, detectaron un lavarropas en funcionamiento, lo que supone que el acusado lavaba las prendas que llevaba puestas durante el asesinato para borrar posibles evidencias.
En este contexto, el fiscal Mana analiza incluir el agravante de violencia de género, lo que podría modificar la imputación a femicidio. El muchacho cumpliría una sentencia a prisión perpetua, la única sentencia que prevé este tipo de ilícitos.