La Línea C del subte estuvo paralizada debido a una medida de fuerza de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), en rechazo a una sanción a un trabajador dispuesta por la nueva concesionaria Emova.

El paro comenzó a las 14 y se extendió hasta las 16, tal como habían adelantado días atrás los metrodelegados en un comunicado.

"La empresa Emova decidió, en forma unilateral y sin acceder a dialogar con los delegados del sector, sancionar a un trabajador del área Trafico con la suspensión de su categoría de Conductor, asignándole tareas que no corresponden a su categoría", explicó el gremio.

Y agregó: "Rechazamos esta sanción injustificada, aguardamos que la empresa Emova revea esta actitud y pedimos disculpas a los pasajeros por las molestias que pueda ocasionar esta medida de autodefensa".

De esta manera, la línea que une las cabeceras de Constitución y Retiro estuvo paralizada durante dos horas, en simultáneo con una piquete que afectó a la Avenida 9 de Julio por un reclamo del Polo Obrero Tendencia, por lo que atravesar esa arteria fue un caos a primera hora de la tarde.

Se trató de una nueva protesta de los metrodelegados que se realizó a poco de que la nueva empresa concesionaria asuma la conducción de los subtes porteños.

A comienzos de diciembre, el sindicato recibió a la nueva empresa con una medida de fuerza, en ese caso levantando los molinetes en la estación cabecera de la Línea D, Congreso de Tucumán, por "subcontratar empleados tercerizados para llevar a cabo tareas de mantenimiento que son propias del personal de planta permanente".