La comisión de Transportes de la Cámara de Diputados realizó otra audiencia en la que expusieron invitados especialistas sobre el flagelo del alcohol al volante.

Fue en el marco del tratamiento de una ley de alcohol cero para todo el país.

El presidente de la comisión, el jujeño Jorge Rizzotti (UCR) se encargó de las palabras introductorias del debate en la sala 1 del anexo, que lució colmada de banderas, carteles y fotos de víctimas de siniestros viales. Asistieron representantes de Asociaciones Civiles y familiares de víctimas.

La vicepresidenta de la Comisión, Jimena López, agradeció a los representantes de las asociaciones civiles y familiares de víctimas presentes, y cedió la palabra, en primer lugar al jefe médico especializado en toxicología del Hospital Fernández, Carlos Fabián Damín, quien advirtió sobre los efectos del alcohol en el sistema nervioso.

Alcohol cero, una ley en avance

"El alcohol es un depresor del sistema nervioso central. El incremento del consumo de alcohol es cada vez mayor. Es una suerte de anestésico y hace años se lo usaba como tal. Cuando uno toma alcohol parece que esta desinhibido", explicó.

Agregó que esto "va acompañado, además, de una disminución de la capacidad de reacción, de una disminución de los reflejos y una disminución de la capacidad para advertir un riesgo, medir un peligro y tomar una decisión".

"Eso es crucial a la hora de manejar un vehículo", sostuvo Damín, y al respecto consideró que "eso hace que uno no pueda advertir el riesgo a la velocidad que corresponde y tomar la decisión adecuada se puede disminuir en segundos y terminar generando un siniestro".

El médico precisó que el argentino consume un promedio de 9,8 a 10 litros de alcohol puro por año", lo que ubica al país en tercer lugar detrás de Canadá y Estados Unidos. En Latinoamérica, Argentina está al tope del ránking.

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Para Damín, la ley actual tiene "incongruencias ya que establece obligaciones diferentes para automovilistas (hasta 0,5 gramos por litro de sangre), motociclistas (0,2 gramos) y conductores profesionales (alcohol cero).

"Es indispensable tener una ley de alcohol cero, no estamos pidiendo una ley seca ni que no se venda alcohol", aclaró.

A su turno, Carlos Silvestri de la Mesa Chubutense de Víctimas Viales denunció que los legisladores "sufren presiones” de sectores que "priorizan su beneficio económico ante el único valor irremplazable que es la vida".

Aclaró, sin embargo, que las ganancias "no se ven afectadas por la norma según las experiencias de países vecinos".

"El concepto de que tolerancia cero al volante más temprano que tarde va a ser ley después de tantos años de lucha", cerró.

El debate sobre la ley de Alcohol Cero continuará mañana a las 14 en el marco de una nueva reunión informativa a la cual fueron invitados el ingeniero Fabián Pons, el doctor Fernando Campagnini y Esteban Bicarrilli.