La familia de Paula Martínez no cree en el suicidio: "Hay muchas dudas"
El abogado de los familiares de Martínez señaló: "La familia tiene muchas dudas, no están claras las circunstancias en las que fue hallada Paula".
La familia de Paula Martínez, la joven de 23 años que fue abusada sexualmente en manada hace cinco años por ocho hombres se suicidó en su casa de Florencio Varela y que fue hallada sin vida el pasado domingo, "no cree en el suicidio".
Así lo indicó Daniel Giaquinta, el abogado de los familiares de Martínez, quien señaló: "La familia tiene muchas dudas, no están claras las circunstancias en las que fue hallada Paula. Hubo muchas circunstancias en la escena del crimen que no son claras".
"Paula vivió un martirio en estos 5 años", sostuvo el letrado en declaraciones televisivas, mientras que dijo: "Yo tengo el mandato de la familia de trabajar en que se investigue otra hipótesis que no sea estrictamente la del suicidio". Además, el abogado comentó que la joven había tenido intentos de suicidios controlados e indicó: "En este caso nos encontramos con una escena totalmente distinta".
En diciembre de 2016, Paula Martínez había denunciado que diez hombres la drogaron, la secuestraron y la violaron en grupo, mientras participaba de la celebración de un cumpleaños. Según explicó, la llevaron a otro domicilio y al menos ocho de ellos abusaron sexualmente de ella.
Posteriormente recibió amenazas y hostigamiento por parte de los imputados y de sus familiares, por lo cual radicó más de 30 denuncias. Según revelaron desde su entorno más íntimo, desde que ocurrió el hecho la joven intentó quitarse la vida en varias oportunidades y hasta estuvo internada con asistencia psiquiátrica.
Algunos años atrás, Martínez había revelado en una entrevista televisiva que cuando se presentó a realizar la denuncia, se cruzó con los presuntos abusadores: "No sé quién les avisó, ni qué fueron a hacer", había cuestionado en ese entonces. Además, denunció que dejaron asentado que "estaba alcoholizada", pese a su aclaración de que había sido drogada y también contó que recibió maltratos por parte del profesional médico a cargo de la examinación.
Allí relató en primera persona el infierno que tuvo que pasar: "Estaba con mi mamá y mi papá en mi casa, y vino la sobrina de los dueños de la casa de enfrente, con la que jugábamos cuanto éramos chicas. Una semana antes del cumpleaños, ella me pidió trabajo y le dije que sí, que me dé su currículum. Me dijo que sí y aprovechó para invitarme a la fiesta de cumpleaños".
"El día de la fiesta (la vecina) me vino a buscar tres veces: las primeras dos le dije que no y la tercera accedí. Cuando voy, el primo de ella, uno de los violadores me dio una bebida que yo creo que ahí estaba la droga. De ahí empecé a sentirme mal, mareada, se me acerca otro de los violadores que es el que me habló y me volvió loca toda la noche y desde ahí recuerdo poco y nada", contó la joven.
"De ahí me llevaron a la esquina, me subieron a una camioneta blanca tipo Traffic y ahí me llevaron a la casa de otro de los violadores. Yo recuerdo que eran más de cinco (personas) porque vi sombras y siluetas pero no sé quiénes son. Los únicos que reconozco son los cinco de la foto (que tenía en su mano)", relató.