La provincia de Tierra del Fuego atraviesa una situación crítica en el sector industrial, con una pérdida significativa de puestos de trabajo en diferentes sectores, especialmente en la metalurgia y la textil.

La pérdida de empleos en el sector industrial continúa a un ritmo alarmante, con la metalurgia como uno de los sectores más afectados. En solo dos meses, entre noviembre de 2023 y enero de 2024, la cantidad de trabajadores metalúrgicos se redujo en un 94,8%, pasando de 3.071 a solo 159 empleados. El personal de prestación discontinua también sufrió un duro golpe, con una reducción del 47,9% en el mismo período, pasando de 1.772 a 929 trabajadores.

Las perspectivas para el futuro no son nada alentadoras, ya que la caída en la actividad industrial continúa sin señales de un cambio de tendencia. La industria textil también está siendo afectada por esta crisis, con cierres de empresas, suspensiones y despidos que se suman a la ya golpeada metalurgia.

Las causas de esta debacle son variadas, pero algunos de los factores que más influyen son la competencia internacional, la falta de competitividad de las empresas locales, la caída del consumo interno y la falta de políticas públicas que fomenten el desarrollo del sector industrial.

Las consecuencias de esta crisis son devastadoras para las familias de los trabajadores afectados, que se ven de un día para otro sin su fuente de ingresos. La situación también genera un impacto negativo en la economía general, ya que la industria es uno de los principales motores económicos de la provincia 23.

Los sindicatos y empresario por igual reclaman que se tomen medidas urgentes para revertir esta situación. Insisten en la necesidad de políticas públicas que apoyen al sector industrial, como la reducción de impuestos, la inversión en infraestructura y la promoción de la innovación. 

Es llamativo que los sindicatos, y principalmente los empresarios, sigan reclamando medidas de este tipo, teniendo en cuenta que Tierra del Fuego es la provincia más beneficiada por programas nacionales de fomento industrial, de hecho cuenta desde hace décadas con un Régimen de Promoción Industrial que les cuesta millones de pesos a los contribuyentes de todo el país. También es necesario que las empresas se adapten a las nuevas condiciones del mercado y busquen formas de ser más competitivas.

La crisis industrial es un problema que afecta a todos. Es hora de que todos los actores sociales, desde el gobierno hasta las empresas y los trabajadores, se unan para encontrar soluciones que permitan reactivar este sector fundamental para la economía provincial. Pero también es hora de que intenten algo nuevo y no las soluciones simplistas de siempre, más y más subsidios a cambio de malos productos, malos sueldos y malas condiciones de trabajo.

Despidos masivos en la metalurgia

  • De 3071 trabajadores en noviembre de 2023 a solo 159 en enero de 2024.
  • Personal de prestación discontinua: de 1772 a 929 en el mismo período.
  • Caída total del 25% en el sector desde enero de 2023.

Las causas de la crisis:

  • Enfriamiento de la economía.
  • Crisis en las ventas.
  • Falta de poder adquisitivo de la población.
  • Competencia internacional.
  • Falta de competitividad de las empresas locales.

Las consecuencias de la crisis:

  • Despidos y suspensiones en las empresas.
  • Reducción del consumo local.
  • Menos circulante en la economía.
  • Afectación al comercio y los servicios.
  • Pérdida de puestos de trabajo en otros sectores.

Reacciones frente a la crisis:

  • La ministra de Trabajo, Sonia Castiglione, describe el escenario como "dramático".
  • Rodrigo Cárcamo, secretario general de SETIA, denuncia dificultades en la industria textil.
  • Gremios como ASIMRA y la UOM alertan sobre la situación y exigen medidas.
  • Se propone una "movilización unitaria y multitudinaria" para defender el subrégimen industrial fueguino.

El impacto en la zona norte:

  • Pérdida de puestos de trabajo en el sector mercantil.
  • Retracción comercial y de dinero circulante.
  • Menos venta de combustibles (caída superior al 10%).

La necesidad de medidas:

  • Políticas públicas para reactivar la industria.
  • Apoyo a las empresas locales.
  • Medidas para aumentar el poder adquisitivo de la población.
  • Defensa del subrégimen industrial fueguino.