Internaron a cuatro personas por consumo de éxtasis y "tusi" en Mar del Plata
Tres fueron dados de alta, mientras que una joven sigue internada aunque fuera de peligro. El hecho sucedió días después de la muerte de la nutricionista Florencia Yturrioz.
El boom de las fiestas electrónicas está más presente que nunca en Mar del Plata y a días de la muerte de la nutricionista Florencia Yturrioz por sobredosis, las autoridades confirmaron que cuatro personas debieron ser internadas por consumo de éxtasis y “tusi”.
Fue el pasado fin de semana cuando se confirmó el ingreso de estos cuatro jóvenes a la guardia del Hospital Interzonal General de Agudos (Higa).
Desde el medio 0223 informaron que los pacientes ingresaron entre el viernes y el domingo con distintos malestares producto del consumo de drogas. Lo que tenían en común es que todos había participado de diversas fiestas electrónicas que se desarrollaron en la ciudad.
Los tres primeros fueron a la guardia entre el viernes y el sábado y después de ser atendidos recibieron el alta, mientras que la cuarta paciente entró el domingo y continúa internada en observación, fuera de peligro.
"La joven de 24 años había consumido "tusi" e ingresó descompensada, obnubilada, con vómitos, con deterioro del sensorio y taquicardia", indicaron desde el medio local.
Los casos ocurrieron días después de que se diera a conocer la muerte de la nutricionista Florencia Yturrioz.
Este caso continúa en investigación para saber si la joven de 26 años consumió por sus propios medios o le colocaron alguna sustancia ilegal en la bebida mientras también estaba en una fiesta electrónica con amigas.
La autopsia confirmó que murió por sobredosis de éxtasis y sigue la labor del fiscal Fernando Berlingeri para corroborar que hizo la nutricionista antes y durante la fiesta.
El después ya está confirmado. Gracias a la declaración de un testigo se confirmó que Florencia se fue del departamento porque quería seguir con la fiesta, se juntó con un grupo de chicos y fue a tomar mate a un balneario del centro.
Este mismo joven remarcó que durante toda la reunión pedía tomar líquido: “Bebía mucha agua, de hecho pidió que le cargaran dos veces una botella”.