Vecinos autoconvocados de los barrios del sur de Mar del Plata cortaron esta tarde la ruta 11 que conecta esa ciudad balnearia con Miramar protestando por mayor seguridad y presencia policial ante la creciente ola de robos y violencia en Chapadmalal.

Los vecinos exigen mayor presencia policial y que doten a los mismos de las herramientas necesarias para un patrullaje eficiente. La extensión de los barrios y la explosión turística de los últimos años no se condice con los recursos que tienen las fuerzas de seguridad. Según relevamientos locales, hay apenas un móvil policial para cubrir 74 km cuadrados.

Chapadmalal tuvo una explosión inmobiliaria y turística en los últimos años de la mano del despliegue de las playas del sur y aquellas que son amplias, agrestes, con grandes olas para los amantes del surf y de la noche con sunsets y restaruantes top.

Pero con todo ello también llamó la atención de los ladrones que ven una oportunidad en la localidad con turistas con dinero y con los habitantes de siempre de los barrios que revelan que hace tiempo las calles son tierra de nadie.

Sin presencia policial, con garitas sobre la ruta 11 vacías día y noche, y sin patrullajes, se sienten a la deriva y los hechos de inseguridad y violencia se repiten todas las semanas, lo que llevó a los vecinos a autoconvocarse y organizarse para protestar y hasta armarse para proteger a los suyos.

Según un relevamiento realizado por los propios habitantes, se registraron más de 50 hechos en los últimos dos meses. La protesta se llevó a cabo a la altura del camping municipal Arroyo Lobería, ubicado en el kilómetro 24,5 de la ruta provincial 11,

"La convocatoria surge a raíz de una serie de hechos de inseguridad que se han dado a lo largo de toda la temporada. Ha habido robos en horarios en los que la gente estaba en la playa, algunos a la noche, y hasta se han metido a las casas mientras la gente estaba adentro", explicó el vecino Daniel Deserti en diálogo con el medio marplatense 0223.

“Nuestro reclamo principal es la falta de presencia policial. Si bien en estos días hablamos con la Departamental y la Subcomisaría de Acantilados, lo que generó que hubiera más patrulleros y personal de civil recorriendo la zona, consideramos que esa presencia debe ser permanente, no sólo ahora porque los vecinos nos enojamos”, manifestó.

La preocupación vecinal también se da en la proyección sobre el invierno. “Si esto está así en el plena temporada, cuando el turismo se vaya, los vecinos que vivimos todo el año estaremos más solos aún, no podemos estar armándonos nosotros y salir a tirar escopetazos por ahí”, sostuvo Federico, vecino del barrio Santa Isabel

El problema es en toda la zona entre Mar del Plata y Miramar. Lindante a Chapadmalal pero ya en la jurisdicción del partido de Gral. Alvarado, cuya ciudad cabecera es Miramar, se encuentra la localidad de Nicanor Otamendi, que sufre el mismo problema. 

A unos 25 km de Chapadmalal también fueron hasta la municipalidad la semana pasada a protestar por falta de seguridad y hechos delictivos.

“La falta de presencia policial en las calles, la carencia de respuesta ante los hechos acontecidos, la administración de recursos y la incomunicación entre las dependencias que deben garantizar la seguridad de la comunidad y sus ciudadanos, fueron algunos de los puntos de los que conversaron en el encuentro”, explicaron vecinos.

Robos en Chapadmalal: “Se llevaron hasta las cervezas sin alcohol”

El detonante que llevó a actuar a los vecinos fue un violento robo con ingreso a dos domicilios que ocurrió el lunes por la noche en el barrio Santa Isabel.  Ladrones ingresaron a una casa, ataron y golpearon a una mujer y su hijo, y cruzaron por la medianera a la casa vecina, que estaba vacía, y la desvalijaron.

Se llevaron todo lo que pudieron hasta las cervezas sin alcohol (porque estoy embarazada) de la heladera, las que se fueron tomando mientras escapaban y fuimos encontrando en el camino anoche gracias a que el celular de mi vecina que se llevaron tiene GPS. Los vecinos, salieron hechos una furia con palos, armas, escopetas”, contó una de las victimas a Noticias Argentinas.

Los ladrones fueron descartando todo en los campos con pastos crecidos. “En fin, descartaron todo en el campo, cómo siempre conocen, se meten con las motos en el campo, esquivan boyeros, cortan camino y salen por atrás”, continuó relatando una de las víctimas.

“Todos nosotros vinimos a vivir a este lugar para estar mejor, y no está siendo posible. Con años más o años menos, ninguno quiere vivir en la violencia que tuvimos anoche, a lo salvaje, cualquiera podía salir lastimado porque éramos todos tratados como animales”, finalizó el relato.

La furia y la impotencia ante la falta de respuesta rápida de la policía al ser llamados generó que los propios vecinos, cansados de los robos, salieran a buscar a los agresores, que fueron descartando los objetos mientras los perseguían por el campo.