Identificaron al envenenador de perros de Magdalena: lo detuvieron y allanaron su casa
Al primer animal muerto se le detectó en su cuerpo "órganos fosforados, posiblemente de alguien que posee agroquímicos o trabaja en el ámbito rural", según confirmó el veterinario que lo revisó.
Tras varios días de investigación, la Justicia logró identificar al hombre que habría envenenado a unos 15 perros en la localidad bonaerense de Magdalena y, luego de un allanamiento en su vivienda, quedó detenido.
Según se informó, se trata de Rubén Garay, oriundo de la ciudad de La Plata y a quien los vecinos denunciantes lo señalaron desde el comienzo de la aparición de perros envenenados. Además, los denunciantes indicaron que el hombre había tenido varias discusiones con algunos de ellos por los perros.
Al primer animal muerto se le detectó en su cuerpo "órganos fosforados, posiblemente de alguien que posee agroquímicos o que trabaja en el ámbito rural", según lo confirmó el veterinario que revisó al perro.
Tras esa primer muerte, aparecieron más animales con los mismos síntomas y se contabilizaron hasta el momento 15 perros fallecidos en circunstancias similares.
La aparición de todas las mascotas muertas motivó la denuncia de otros vecinos y así la investigación llegó Garay, quien fue imputado en las últimas horas por el incumplimiento del Artículo 200 del Código Penal, que establece una pena a “prisión de tres (3) a diez (10) años y multa de diez mil pesos($10.000) a doscientos mil pesos ($200.000), el que envenenare, adulterare o falsificare de un modo peligroso para la salud, aguas potables o sustancias alimenticias o medicinales destinadas al uso público o al consumo de una colectividad de personas”.
El abogado de los denunciantes, Juan Manuel Fontana, fue quien pidió la detención inmediata del hombre que, al parecer, ya contaba con antecedentes relacionados al envenenamiento de animales en esa zona de Magdalena.
Trascendió que durante la investigación que ya lleva una semana, se detectó un envase de leche en lata que tenía una sustancia embebida en un papel blanco y una espumadera. El producto reveló así la metodología que habría utilizado el acusado para matar a las mascotas, ya que al menos dos de los perros tenían un trozo similar en la boca cuando fueron encontrados muertos.
Y otra prueba que podría ser considera en contra de Garay, es que el recipiente estaba colocado a solo quince metros de distancia de su casa.