Cuatro imputados en la causa conocida como Escuela de Yoga, quienes viven en Estados Unidos, pidieron al juez Ariel Lijo que deje sin efecto las órdenes de captura internacionales libradas contra ellos.

Verónica Iácono, Sonia Brufman, Pablo Sinigaglia y Gabriel Sorkin formularon el pedido argumentando que “no hay conducta penal alguna reprochable”, puesto que ni el denunciante, ni las presuntas víctimas, ni los testigos aludieron a ellos.

“Venimos a solicitar que se levanten los pedidos de captura que obran en nuestra contra. (…) Nos hemos establecido en los Estados Unidos entre 2005 y 2007. Es decir que hace unos 20 años todos vivimos en dicho país. Nuestra radicación en Estados Unidos es definitiva”, explicaron mediante una presentación ante el juzgado.

“Las capturas internacionales que se han librado en nuestra contra no sólo nos han sorprendido sino que nos han complicado de manera absoluta en la vida laboral, profesional, social y familiar”, añadieron.

El documento subrayó que la investigación, en la que intervinieron los fiscales Marcelo Colombo, Alejandra Mángano y Carlos Stornelli, deslizó que los cuatro imputados podrían estar incursos en el delito de contrabando.

Pero contrapusieron que “la imputación por contrabando fue desechada por la Sala II de la Cámara Federal, cuando revocó las prisiones preventivas de otros imputados”.

El juez Lijo formó un incidente por separado para tratar los pedidos de levantamiento de las órdenes de captura.