El Santo del día es una reseña diaria de los santos guardados en la memoria de la Iglesia. Historias de maestros de vida cristiana de todas las épocas que como faros luminosos orientan nuestro camino. El 14 de noviembre es el día de San Serapino.

San Serapino nace en Londres en 1179. De chico Serapio está con su padre en la tercera Cruzada de Ricardo Corazón de León. Después de varias peripecias entra en los Mercedarios y se dedica al rescate y a la conversión de los esclavos, liberando a centenares en Francia, España y Argel, donde muere mártir en 1240.

San Serapio mártir fue un militar de origen irlandés que participó en las cruzadas al servicio del rey Ricardo Corazón de León.1​ De regreso viajó a España, donde participó en la Reconquista, sirviendo en las filas de Alfonso VIII, después de lo cual conoció a San Pedro Nolasco y a los frailes mercedarios. Ingresó en la Orden de la Merced en 1222, y participó en varias redenciones. En su última redención, se quedó como parte de pago para la liberación de algunos cautivos, pero el dinero para su rescate no llegó a tiempo. El 14 de noviembre de 1240, bajo el reinado de Abu Muhámmad ar-Rashid, fue martirizado por los sarracenos, quienes le ataron a una cruz en forma de aspa y arrancaron los intestinos; luego le cortaron las extremidades. Es protomártir de la orden mercedaria.​

En 1743 fue inscrito en el catálogo de los santos. Su festividad se celebra el 14 de noviembre. Es considerado el patrono de los enfermos y de la ciudad de Azul, provincia de Buenos Aires, y la devoción a él ha hecho recurrente el uso del aceite que lleva su nombre, para los padecimientos en la zona abdominal.