El padre del kiosquero asesinado dijo que "arruinaron" su familia y pidió "pena de muerte a los chorros"
Entre lágrimas, Pedro, quien había iniciado el negocio familiar de Ramos Mejía en el que mataron a su hijo Roberto Sabo, criticó a Alberto Fernández y Cristina Kirchner.
Entre lágrimas, el padre de Roberto Sabo, el kiosquero asesinado hoy en Ramos Mejía, aseguró que los autores "arruinaron" su familia y que nunca más va a poder "vivir tranquilo", mientras que pidió "la pena de muerte para los chorros".
Pedro, quien inició el negocio familiar que continuó Roberto en el local de Avenida de Mayo al 800 en el que fue asesinado por una pareja de asaltantes compuesta por un joven de 29 años y una menor de 15, pidió que "no salgan más", mientras vertió duras críticas contra el Gobierno nacional, especialmente al presidente Alberto Fernández y la vicepresidente Cristina Kirchner
"Nunca pensé que me iba a pasar esto. Me arruinaron la familia. Nunca más puedo vivir tranquilo. Quiero agradecer a Alberto y a Cristina, que largan a los chorros, a todos los asesinos, a los matones, a matar gente buena a la calle. Gracias Alberto y gracias Cristina", sostuvo en declaraciones a la prensa.
En un video que circuló en redes sociales, se lo vio llorando frente al drugstore "Pato", en el que alrededor de las 14:00 mataron a su hijo Roberto de un disparo en la cabeza, mientras pedía "pena de muerte para los chorros".
"Agradezco a mucha gente que viene a saludarme, que hace 40 años que trabajo en la misma cuadra. No sé qué decir. Nunca pensé que me fuera a pasar esto. Quisiera cortarle las manos a quien vote por Alberto y por Cristina. Porque nunca les pasó nada seguramente. Yo no pensé que me iba a pasar esto. Me arruinaron toda la familia, nunca más voy a vivir tranquilo”, añadió Pedro, mientras era acompañado y consolado por numerosos vecinos.
El hombre, en declaraciones al canal TN, expresó: "Nunca pensé que me iba a pasar esto. Me arruinaron la familia. Nunca más puedo vivir tranquilo. Quiero agradecer a Alberto y a Cristina, que largan a los chorros, a todos los asesinos, a los matones, a matar gente buena a la calle. Gracias Alberto y gracias Cristina. Y gracias Guillermo Moreno".