El papá de la joven modelo brasileña Emmily Rodríguez, quien murió al caer del departamento del empresario Francisco Sáenz Valiente, ahora acusó por homicidio culposo a la amiga de ella, Juliana Magalhaes Mourao, quien estuvo junto a ellos dos el 30 de marzo pasado.

La presentación de la acusación fue cuando el fiscal Santiago Vismara había citado a la joven a declarar nuevamente como testigo, algo que se suspendió a raíz de ese pedido.

Juliana alias “Juli” estuvo esa madrugada junto al empresario y la modelo, y por ello ahora el papá de la víctima, que tiene otro abogado del de su madre, pidió que ella también se la acuse por el mismo delito en el que está procesado Sáenz Valiente. 

El empresario está en libertad acusado por homicidio culposo, luego que inicialmente estuviese detenido por homicidio y luego por abandono de persona seguido de muerte las cuales tienen acusaciones más duras que aquel delito.

Asimismo, también está procesado por suministro gratuito de estupefacientes, en concurso ideal con facilitación de un lugar para su consumo, a raíz de haber aportado la droga que se consumió esa madrugada. 

El empresario cuando pactó aquella madrugada pasadas apenas las 24 horas la llegada de las cuatro chicas al departamento, entre ellas Emmiy quien llegó junto con otras dos y se encontró que en departamento de Libertad al 1500 ya estaba Saenz Valiente con otra mujer. 

Luego se supo que dos se fueron durante la madrugada y quedó Emmily junto con “Juli” y el empresario. Estos dos aseguran que aquella había consumido drogas, que le agarró una suerte de brote psicótico y se tiró del balcón. 

Sobre el suministro de drogas, la Cámara valoró que ni bien pactó el encuentro en su departamento, Sáenz Valiente chateó con una persona de quien se sospecha es una suerte de “dealer” a quien le solicitó “dos blancos y un tus” en referencia a las drogas. 

Las testigos refieren que hubo consumo de ese tipo de estupefacientes durante la madrugada.

“El imputado facilitó gratuitamente tales estupefacientes, al ponerlos a disposición de sus invitadas y su domicilio para que pudieran consumirlos. Es irrelevante cómo y quién organizó el encuentro; en lo que aquí interesa, fue él quien proporcionó las sustancias como también el lugar para su consumo”, acotó el Tribunal al evaluar el caso.

Los jueces incluso valoraron los llamados que el empresario hizo a las 9.13 horas al 911 luego que a las 9 ella tuviese -según la defensa- el brote psicótico, donde tanto él como la modelo de fondo piden la presencia policial. Luego hay otro llamado un minuto más tarde donde piden nuevamente la ocurrencia de la policía. 

Por ello entienden que “llevó adelante situaciones de auxilio” cuando la situación se puso “inmanejable” pero sí que por las drogas que él suministro, Emmily “tuvo una situación de descompensación psiquiátrica que determinó que cayera de una de las ventanas del departamentos”.

“Creo una situación de peligro concreto”, concluyó por mayoría el tribunal y descartó la acusación de homicidio de la querella. 

"Al haber puesto tales estupefacientes a disposición de sus invitadas, Sáenz Valiente creó un riesgo jurídicamente desaprobado, con incidencia directa en el resultado. Las partes coinciden en que Emmily atravesó un “brote psiquiátrico” agudo a causa del consumo de diversas sustancias -alcohol, tusi y cocaína-. La propia defensa se encargó de presentar informes de expertos en toxicología donde se advierte sobre las posibles consecuencias de “la cocaína rosa”, señalaron.