Mientras se prepara para empezar la segunda temporada de "Alguien tiene que decirlo", de lunes a viernes de 9 a 12 por Radio Rivadavia, Eduardo Feinmann se prestó a un conversación con Noticias Argentinas en las que adelantó cómo será su programa y analizó cuáles serán los ejes más importantes de cara a las elecciones legislativas de octubre.

"Tenemos muchísimas ganas de arrancar el lunes y tratar de seguir consolidándonos en el horario, que es muy competitivo. Hemos crecido mucho de la nada, de ser nada, ya estamos casi en el segundo lugar en audiencia y seguimos creciendo. Y así también va a seguir creciendo la radio", dijo el conductor, que seguirá acompañado por Guadalupe Vázquez, Manuel Adorni, Mariana Clark, Elio Rossi y el doctor Claudio Zin. "Equipo que gana no se toca", señaló.

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Y aseguró que debido a la pandemia y los cambios sociales y económicos que desencadenó, el público está mucho más pendiente de los temas relacionados a la política.  "Muchas cosas que les pegan de lleno, como la corrupción, la inflación, el desempleo y la gente necesita mucha información", explicó. Y agregó: "El 2021 puede llegar a ser un año clave, bisagra, por ser un año electoral. El 2020 fue muy complicado y este año a la complicación de salud, creo que se le va a sumar una complicación fuerte económica".

Además, se refirió a las incorporación de Luis Majul y Jonatan Viale a la emisora, con "Esta mañana" y "Pan y circo". "Tengo muchas expectativas. Me parece que la incorporación de Luis y Jonatan le van a dar una fuerza mucho mayor a Radio Rivadavia, que ya venía sumando gran cantidad de audiencia en solo un año", sostuvo. Y explicó por qué a diferencia de Majul, prefiere que el pase entre sus programas no esté hablado de antemano: "Por supuesto que haremos pase y hablaremos de lo que venga. No me gusta prepararlos, con Joni en la tele tampoco lo hago, porque justamente el chiste o la gracia que tiene el pase es la espontaneidad".

Con respecto a su salud, luego de contagiarse coronavirus en agosto y pasar varios días internado, Feinmann manifestó que se encuentra muy bien. "Me siento bárbaro. Estoy totalmente recuperado y sin ningún tipo de secuela. Mi carga viral fue de 100 millones y  fue una bomba atómica en cuerpo. Ahora tengo un altísimo nivel de anticuerpo y estoy más que inmunizado", concluyó.

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