Dos hermanitos de seis y diez años murieron ahogados en una playa de Aguas Verdes
Los pequeños ingresaron rápidamente al mar y fueron arrastrados por una ola. Fallecieron horas más tarde en el hospital al que fueron llevados.
Dos hermanos de seis y diez años murieron tras ahogarse en una playa de la localidad bonaerense de Aguas Verdes, en el partido de La Costa.
El trágico hecho se registró este domingo, cerca de las 14.30, en una playa situada entre los balnearios de Chiriguano y Yate Fortuna.
Luego de ser perdido de vista por sus familiares, los niños, que se llamaban Joaquín y Gabriel, fueron encontrados por guardavidas, que intentaron reanimarlos y fueron llevados al Hospital de Mar de Ajó, donde fallecieron horas más tarde.
Los chicos junto con sus padres veraneaban en San Clemente de Tuyú y ese día decidieron cambiar de plata para coincidir con familiares. Cuando llegaron a la playa, los niños se encontraron con unos primos de edad similar, con los que se dirigieron rápidamente al mar mientras los adultos acomodaban los bolsos y objetos de playa.
“Nunca en los días anteriores pasó nada, los chicos estaban atentos con nosotros, esto fue un instante: apenas llegaron corrieron al mar con sus primitos", expresó Natalia Ullúa, madre de los pequeños, en diálogo con el sitio del diario La Nación.
Explicó, al referirse al triste episodio, que a los niños "una ola los arrastró, se los llevó y los perdimos entre tanta gente” Relató que los bañeros lograron reanimar a los chicos y mantener su sobrevida. No obstante, los niños presentaban un daño cerebral irreversible y fallecieron en horas de la madrugada del lunes en el hospital municipal al que habían sido llevados.
“Siempre tuve esperanzas de que se iban a recuperar, no puedo creer lo que pasó", resumió entre lágrimas la madre de los chicos. El director del centro asistencial, Ariel Albert, relató que los médicos trabajaron durante 40 minutos con un chico y durante una hora con otro para sacarlos del paro cardirespiratorio, pero el daño cerebral era irreversible.
“El personal de Guardia junto con Pediatría decidieron entrarlo en asistencia mecánica respiratoria pero la función cerebral nunca revirtió. Las pupilas no presentaban reflejo y eso habla de un daño cerebral irreversible”, explicó en declaraciones al sitio local El Faro.
“Después de unas horas se dieron por finalizadas las maniobras de resucitación, quedaron con asistencia mecánica porque habían hablado con la familia para la ablación de órganos”, agregó..