El delincuente que asaltó y abusó sexualmente de una panadera hipoacúsica en la localidad bonaerense de Virreyes fue detenido hoy en la zona de Los Troncos del Talar por efectivos de la Policía Bonaerense.

Fuentes policiales informaron a NA que personal de la seccional Los Troncos, en conjunto con el de Estación de Policía San Fernando, y las Subddi Tigre y San Fernando, procedieron a apresar a este sujeto, identificado como Cristian Andrés Vivas, quien el pasado 20 de marzo entró armado a robar a una panadería, donde le sustrajo dinero en efectivo y el teléfono celular a una empleada. Asimismo, el asaltante la obligó a entrar al baño y abusó sexualmente de ella.

Los voceros policiales relataron a Noticias Argentinas que el delincuente tiene antecedentes penales por delitos de robo y había salido de prisión hacía un mes.

En ese sentido, la última condena había sido de cuatro años por "Robo agravado por haber sido cometido mediante la utilización de un arma de fuego cuya aptitud para el disparo no pudo ser acreditada".

Estuvo en la Unidad 41 de Campana del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) desde el 27 de marzo de 2018 hasta el 22 de febrero pasado, por lo que 26 días después de haber sido liberado no solo volvió a asaltar sino que también abusó de esta joven.

El ladrón golpeó a la empleada hipoacúsica de 22 años, la ató con un cinturón, la encerró en el baño y la abuso sexualmente tras pedirle que se quite la ropa.

Todo quedó registrado en las cámaras de seguridad que se difundieron.

"Vos quédate ahí, esto es un robo", fue lo primero que dijo el delincuente al ingresar y, de inmediato la joven, que no quiso dar su nombre por seguridad y miedo, le entregó el dinero que había en la caja, pero el ladrón insatisfecho le pidió su celular y luego que se encerrara en el baño.

La empleada le contó a su mamá que el sujeto la llevó al baño, le arrancó el cinturón, le pegó una piña y le dio un culatazo en la cabeza: "En uno de los golpes le rompió los anteojos y quedó con un zumbido en el oído. La apuntó con un arma y la manoseó", señaló Vanesa, su madre.

En las imágenes se puede escuchar como el sujeto le dice a la víctima: "Andate para atrás, sacate la ropa. Ahorrame tiempo y mirame".

Ante dicha situación, la joven le suplicó varias veces que se vaya y que no le haga nada ya que es madre de dos hijos.

Después de unos minutos el hombre se retiró del lugar como si nada hubiese pasado y la empleada quedó atada y encerrada en el baño.

Cuando pudo escaparse salió corriendo y solicitó ayuda en un kiosco lindante y en ese momento vio que el delincuente estaba en la parada de colectivos.

A su vez, se puede observar que mientras sucedía el robo y abuso, un patrullero de la Policía Bonaerense pasaba por el lugar sin poder registrar qué es lo que sucedía dentro de la panadería.

Luego de haber sido atendida por los médicos de la ambulancia la joven y la dueña de la panadería radicaron la denuncia correspondiente: "Le duelen las costillas, tiene los ojos hinchados de tanto llorar", comentó la mamá de la empleada.