Dos personas fueron detenidas este lunes en las inmediaciones del Bingo de La Plata por pedir dinero de manera amenazante a los clientes que ingresaban y salían del recinto.

Según informaron fuentes oficiales, una llamada al 911 alertó a la policía bonaerense sobre la presencia de dos hombres que se encontraban en la puerta del recinto "realizando desmanes". Los agentes de la comisaría Segunda que se encontraban haciendo una recorrida por la zona procedieron a advertir a los implicados, pero éstos forcejearon con las autoridades y fueron demorados.

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En la comisaría les tomaron sus datos y notificaron la situación a la UFI N°5 del Departamento Judicial de La Plata, que avaló el accionar de los agentes. La causa que involucra a los dos hombres, de 30 y 39 años, quedaron demorados por "resistencia a la autoridad" y luego fueron liberados.

La situación de la sala de juegos platense tomó mayor notoriedad luego de su clausura que duró dos semanas y requirió insignificantes reformas para su reapertura.

Clausura y reapertura

El Bingo de la capital bonaerense fue clausurado recientemente por una denuncia por discriminación que presentó un cliente con sobrepeso. El apostador afirmaba que la sala no cumplía con las condiciones de accesibilidad para personas de su talla, lo cual fue corroborado por las autoridades.

Las autoridades gubernamentales explicaron en aquella oportunidad que "el bingo no tiene las butacas adaptadas que debiera tener para las personas con obesidad". Y agregaron que "tienen que tener un mínimo de 85 centímetros de ancho y deben estar distribuidas en diferentes lugares para que no haya discriminación".

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Por este motivo, la sala de juego perteneciente al Grupo CODERE estuvo cerrada por dos semanas hasta que reabrió con una modificación que muchos consideraron un mero maquillaje. Dos sillones puestos en dos descansos de la sala fueron suficientes para permitir la reapertura. Esto levantó mucha polémica e indignación entre los clientes que fotografiaron las reformas y las tildaron de “insuficientes”.

Las autoridades del Instituto de Loterías y Casinos de la Provincia de Buenos Aires cerraron, desde mediados de abril, un total de 13 salas que opera la firma de origen español, la mayoría por cuestiones edilicias.

Sin embargo, fuentes del sector aseguran que los motivos por los que fueron clausuradas la mayoría de las salas son faltas menores que se pueden encontrar en muchas de las salas de juego en territorio bonaerense. Tanto los directivos de CODERE como los gremios que representan a sus trabajadores dudan de las verdaderas razones que motivaron las investigaciones y posteriores cierres.