La Cámara de Casación porteña confirmó la condena a un año de prisión y dos de inhabilitación para un policía de la Ciudad acusado de golpes y otros maltratos a un detenido, incluso cuando ya estaba esposado.

La condena recayó sobre el oficial Ramiro Sebastián Torres, por el delito de “vejaciones”.

LEÉ: Era la promesa de San Lorenzo, pero fue condenado a prisión perpetua por un crimen con sello narco

Según se desprende del fallo, los hechos ocurrieron el 1 de febrero de 2015 a las 3.15, “aproximadamente, en el marco del procedimiento policial que se llevó a cabo en la intersección de las calles O’ Brien y Lima”, del barrio porteño de Constitución.

Allí, en el marco de una gresca entre varias personas, la Policía de la Ciudad llevó a cabo un “procedimiento en el que resultó detenido el damnificado Osmar Vázquez Montaño”.

“A las 02.53.18 y 03.04.25 horas según surge de las filmaciones registradas por las cámaras, el imputado Torres le propinó a Vázquez Montaño diversos puntapiés en su cuerpo. Asimismo, a las 03.05.09 horas, según las imágenes señaladas, en oportunidad en que Vázquez Montaño es esposado, Torres le efectuó golpes de puño”, describe el fallo.

“Posteriormente, a las 03.10.50 horas, según aquella grabación, mientras el prevenido se hallaba esposado, Torres lo acostó sobre el suelo boca abajo, pese a que el mismo no ofreció resistencia en ningún momento”, abunda la descripción.

LEÉ: Lo liberaron pero 48 horas después volvió a ser detenido por robar un celular

La condena había sido dictada por un tribunal oral local y apelada por la defensa del policía, a cargo del penalista Gustavo D’Elía.

Los jueces Mauro Divito, Jorge Rimondi y Gustavo Bruzzone rechazaron la apelación y ratificaron la condena, que aún tiene una instancia más –la Corte Suprema- antes de quedar firme.