Condenaron en Mendoza a un subcomisario de la Policía Federal por abuso sexual y de autoridad
Eduardo Javier Casas Rusch fue sentenciado a 4 años de prisión e inhabilitación para integrar fuerzas de seguridad y especial perpetua.
Un subcomisario de Mendoza fue condenado a 4 años de prisión e inhabilitación para integrar fuerzas de seguridad y especial perpetua por el delito de abuso sexual y de autoridad contra dos policías.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) Nº1 de Mendoza sentenció al subcomisario de la Policía Federal Argentinas, Eduardo Javier Casas Rusch, por el abuso sexual agravado a una agente de la misma fuerza y por el abuso de autoridad y el incumplimiento de los deberes de funcionario público en relación a una segunda subalterna, en hechos que sucedieron entre 2019 y 2021.
Para el Tribunal, Rusch es autor de los delitos de abuso sexual, abusando de la relación de dependencia, de autoridad o de poder agravado por haber sido cometido por un funcionario de una fuerza policial en ocasión de su función, en concurso real con incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Desde Fiscales anunciaron además que las dos damnificadas fueron declaradas como víctimas de violencia de género por los hechos acreditados en la causa.
Se dispuso también una indemnización de $8 millones en concepto de daño moral, sumado al apoyo terapéutico para ambas mujeres, así como de cualquier otra necesidad relacionada con su salud psicofísica.
Caso
Según lo acreditado, el subcomisario de la PFA abusó sexualmente, acosó y hostigó a una efectiva hacia finales de 2019 y hasta octubre de 2021 en sede de la División Unidad Operativa Federal Mendoza y en la Secretaría Previsional, en Mendoza.
A su vez, el acusado maltrató, hostigó y discriminó por motivos de género a otra agente de guardia interna de la misma división, conductas violentas que escalaron desde que empezó a cumplir funciones como jefa de servicio en la guardia en el año 2020.
Estos abusos, de acuerdo a lo explayado en el juicio, “afectaron la vida, dignidad, integridad física, psicológica, sexual y la seguridad personal de las mujeres victimizadas”.