Clausuraron la clínica de Belgrano inspeccionada por "posible ejercicio ilegal de la medicina"
Durante el operativo los investigadores encontraron medicamentos vencidos y pacientes hacinados. Hasta el momento hay tres personas imputadas.
La Clínica Nueva Belgrano que fue inspeccionada tras varias denuncias en las redes sociales fue clausurada por la justicia porteña tras detectarse irregularidades relativas a la seguridad e higiene y por encontrar personal sin habilitación profesional compatible con las funciones desempeñadas.
Hasta el momento hay tres personas imputadas, y según confirmaron fuentes judiciales a NA, la clausura se decidió tras la inspección solicitada por la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas 5.
La clínica solo funciona por ahora con el mantenimiento de los pacientes que ya están internados, pero no puede recibir ni atender nuevos pacientes, ya sea por consultorios externos o por emergencias de guardia.
Durante la inspección realizada este jueves, se constató que una doctora con especialidad en medicina clínica se hacía pasar por cardióloga, sin poseer dicho título habilitante. Además, una persona que se desenvolvía como enfermera no pudo acreditar su título.
También se hallaron medicamentos vencidos y en conservación técnica farmacéutica deficiente, que fueron sacados de circulación y se constataron también faltas generales relativas a la seguridad del establecimiento, así como faltas concernientes al correcto tratamiento de residuos peligrosos, patogénicos y patológicos.
Los investigadores pudieron establecer que la clínica no cuenta con certificación de aptitud ambiental como generador de residuos peligrosos, ni con certificado de tratamiento y disposición final de residuos patogénicos, ni con sector de acopio de residuos patogénicos, encontrándose durante la inspección residuos patogénicos en contenedor junto a residuos urbanos.
La causa se inició por tareas patrullaje virtual de la División Delitos contra la Salud de la Policía de la Ciudad, que detectó la existencia en redes sociales de mensajes agraviantes hacia la clínica por parte de supuestos familiares de pacientes.
El procedimiento fue realizado por el Cuerpo de Investigaciones Judiciales del Ministerio Público Fiscal porteño en conjunto con la División Delitos contra la Salud Policía de la Ciudad, la Dirección Nacional de Habilitación, Fiscalización y Sanidad de Fronteras del Ministerio de Salud de la Nación, APRA, DGPT, DGFYC y DGCONTA.
Hasta el momento, y según las fuentes, se encuentran imputados la médica clínica que se hacía pasar por cardióloga sin estar inscripta en Ministerio de Salud para dicha especialidad, una persona que se desempeñaba como enfermera que no pudo acreditar título habilitante, y el responsable de la clínica.