Una banda narco que operaba en el oeste del Conurbano y contaba con un poderoso arsenal, entre el cual se incluía una réplica de ametralladora antiáerea, fue desbaratada en las últimas horas tras la detención de cuatro de sus integrantes, luego de siete allanamientos en los partidos de Merlo, Ituzaingó y Moreno, efectuados por personal de la Policía Bonaerense.

Fuentes policiales informaron a NA que la investigación se inició a raíz de que se tomó conocimiento de que un grupo delictivo vendía drogas en la localidad bonaerense de Mariano Acosta, en el distrito de Merlo.

La fiscalía interviniente dispuso que se realicen filmaciones y fotografías que concluyeron que existían cinco domicilios y un punto de venta en la vía pública, todos dentro del barrio San Luis, de la mencionada localidad, además de la identificación de siete sospechosos.

Estos sujetos eran provistos de estupefacientes por otros dos que se movilizaban uno en una camioneta Jeep de color blanco y residía en Ituzaingó, y el otro en un automóvil marca BMW y vivía en un barrio cerrado de Moreno, quienes además cometen estafas a otras bandas como así también robos y entraderas en los partidos de Ituzaingó, Morón y Merlo.

En ese aspecto, en los alrededores de las zonas donde vendían drogas se produjeron enfrentamientos armados entre esta organización narcocriminal y bandas rivales por la disputa del territorio, y en ocasiones se escuchaban detonaciones de armas de fuego con el fin de amedrentar a los compradores.

Los lugares allanados en la localidad de Mariano Acosta se encuentran en un radio de cinco cuadras de donde fue asesinado Jeremías Montenuevo en un intento de robo de su motocicleta el pasado 5 de agosto.

La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 9 del Departamento Judicial Morón, a cargo del fiscal Antonio Ferraras, y ordenado por el Juzgado de Garantías número 6, a cargo de Gustavo Robles, uniformados de la Delegación Morón Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado de la Policía Bonaerense llevaron a cabo siete allanamientos -cinco en Mariano Acosta, uno en Ituzaingó y uno en Moreno-, y detuvieron a cuatro personas.

En los mismos se secuestraron 1,223 kilos de cocaína distribuidos en 959 envoltorios, dos balanzas de precisión; documentación; cuatro teléfonos celulares con dos chips con su numeración recortada; diez relojes y una cadena dorada; un handy policial, una sirena de auto, un chaleco de transporte con inscripciones Servicio Penitenciario Bonaerense, un pantalón de Gendarmería Nacional Argentina, una campera con inscripciones Policía Federal Argentina.

También incautaron una garibaldina con inscripciones y dos camisas de la Policía Bonaerense, dos tonfas, un correaje con porta cargadores, una campera refractaria con inscripciones Policía San Martín, una insignia y una gorra del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), una insignia de PFA, juego de esposas con llave y porta esposas, dos pistoleras y una DVR de cámaras de seguridad.

Además, se secuestró un cuaderno donde se observa un plano hecho a mano con posibles tareas de inteligencia y copias de las cuadrículas de las Comisarías de Tres de Febrero y San Isidro entre otras, con precintos de seguridad.

El dinero secuestrado es de un total de 44.310 pesos, 100 dólares y 5 euros, mientras que el armamento incluía la ametralladora antiaérea y dos revólveres calibre 32, una escopeta tumbera, una carabina calibre 22, una escopeta calibre 22 con mira telescópica, una escopeta calibre 22 mm, una escopeta calibre 22, un pistolón calibre 16, una pistola marca Bersa Thunder Pro calibre 9 milímetros.

También incautaron diez cartuchos de calibre 12, diez municiones calibre 32, cinco cartuchos calibre 16, veinte municiones calibre 20, tres cargadores calibre 9mm, noventa y siete municiones calibre 9 milímetros, tres municiones calibre 9mm punta de teflón, diez municiones calibre 38 special, una munición calibre 45 mm, 6 cartuchos calibre 12/70 antitumulto, y cinco vainas servidas de diverso calibre.