Caso Lucas González: policía culpó a otro de plantar el arma en el auto en el que iban los jóvenes
El declarante, que en el juicio está imputado por encubrimiento, dijo que su compañero actuó por orden de un comisario.
Un oficial de la Policía de la Ciudad que es acusado de encubrimiento en torno al asesinato del futbolista juvenil Lucas González, en el barrio porteño de Barracas, sindicó hoy a otro efectivo como el que plantó en el arma en el auto en el que se desplazaba la víctima junto a tres amigos tras recibir la orden de un comisario.
En el marco del juicio por el caso que se celebra en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 25, el oficial Claudio Cuevas, de 50 años, señaló a su par Gabriel Issasi, de 41, como quien vestido de civil arrojó el arma en la parte trasera del auto en el que circulaban los jóvenes, después que fuera atacado a balazos por policías.
Cuevas también señaló que fue el comisario Roberto Inca quien le indicó a Issasi que proceda a ese acto aparentemente para simular un enfrentamiento.
Los policías Issasi, Fabián Andrés López, de 48 años, y Juan José Nieva, de 37, están acusados de los delitos de homicidio agravado por alevosía y por concurso premeditado de dos o más personas, en tanto que otros once efectivos son juzgados como acusados de encubrimiento.
Lucas González, tenía 17 años y jugaba en las inferiores del Club Barracas Central. En horas de la mañana del 17 de noviembre de 2021 el joven regresaba con tres de sus amigos de entrenar en un Volkswagen Suran a su domicilio en Florencio Varela.
Después de parar a comprar un jugo en un kiosco los menores fueron interceptados por un auto Nissan Tiida en el que viajaban
tres efectivos policiales de la Brigada 6 de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad.
Al no identificarse los policías, los jóvenes decidieron escapar de la situación al creer que se trataban de ladrones. En la huida los policías dispararon y uno de los tiros le dio a Lucas en la cabeza.
El chico murió al día siguiente en el Hospital El Cruce de Florencio Varela tras estar internado en coma. La reconstrucción de los hechos fue clave ya que se pudo constatar que después del hecho los Policías, junto a otros oficiales imputados, trataron de encubrir el crimen haciendo pasar la escena como una persecución entre delincuentes.