El Servicio Penitenciario Bonaerense iniciará el próximo sábado un plan piloto de visitas de familiares de internos en todas las unidades penitenciarias y alcaldías de la Provincia, luego de las intensas protestas registradas el fin de semana pasado en varias cárceles, donde hubo toma de rehenes y copamiento de instalaciones.

La prueba piloto es de cara a reanudar las visitas a presos a partir del 14 de noviembre próximo, poniendo fin a una paralización vigente desde marzo pasado cuando se implementaron medidas desde el Poder Ejecutivo para evitar los riesgos de contagio de coronavirus.

La reanudación de visitas surgió luego de un acuerdo con el Ministerio de Salud Pública de la Provincia, que convalidó el protocolo de salud penitenciaria para dar cumplimiento a las normas de bioseguridad para contexto de encierro en el marco de la pandemia COVID 19.

El acuerdo incluyó la participación de los veinte municipios donde funcionan los 63 establecimientos penitenciarios bonaerenses.

El protocolo de visitas será con frecuencia, cupos, medidas sanitarias y demás precauciones especiales para evitar el contagio del virus en los establecimientos.

Según ese acuerdo, los municipios colaboraran con el monitoreo y la fiscalización de la aplicación de los protocolos puestos en marcha.

El pasado fin de semana, en varias unidades, con el foco en la de Lomas de Zamora, San Martín y Florencio Varela, hubo un intenso amotinamiento que en algunos casos incluyó toma de rehenes de agentes penitenciarios por parte de los presos y protestas generalizadas.