Los médicos recomiendan hacerse un análisis de sangre todos los años, pero sobre todo luego de los 40 para prevenir enfermedades y adelantarse a situaciones antes que sea demasiado tarde.

Y cada vez que vamos a hacernos un análisis o donar sangre hay que tomarse varias horas de ayuno, sin saber realmente a qué se debe esta situación.

Ayuno antes de un análisis: ¿mito o verdad?

El ayuno antes de una analítica de sangre es esencial, porque los médicos indican que para un análisis sanguíneo normal el tiempo de ayuno debe ser en tornos 8-12 horas.

¿Por qué es fundamental el ayuno? Porque de no ser así, parámetros como la glucosa, el colesterol o los triglicéridos pueden aparecer alterados en los resultados debido a los azúcares o grasas. 

Por lo cual, lo más recomendable es que la noche anterior se cene temprano, entre las 20 y las 21 horas, y se realice la extracción sanguínea a primera hora de la mañana.

¿Se puede tomar agua antes de un análisis?

Muchas veces es casi automático tomar un sorbo de agua cuando nos levantamos y luego nos agarra la duda si ese día tenemos que ir a hacernos un análisis de sangre.

Lo que se debe hacer es que el ayuno está relacionado con el consumo de alimentos sólidos y líquidos, como el café (con o sin azúcar), té o mate. 

Sin embargo, el ayuno se refiere al agua. Durante el ayuno para la realización de una analítica de sangre se puede beber agua, en pequeñas cantidades y de forma moderada.