Asesinaron a una mujer de 80 años en Santiago del Estero: su hijo quedó detenido
En el hospital, el hombre dijo que su mamá se había descompensado pero tras las acusaciones de sus hermanos y la pericia médica, se lo llevaron detenido.
Una mujer de 80 años fue asesinada a golpes y llegó muerta al hospital al ser trasladada por uno de sus hijos, quien finalmente quedó detenido por el hecho, ocurrido en la ciudad santiagueña de La Banda.
El grave episodio tuvo lugar el pasado domingo por la tarde cuando un hombre, identificado como Aldo Gerez de 40 años, arribó a la guardia del centro asistencial en un vehículo particular con su madre, Gladys Gerez. El sujeto le comentó a los enfermeros que su mamá, con quien convivía, había comenzado a descompensarse por lo que decidió trasladarla al hospital. Asimismo, relató que en el camino se había comunicado con su hermana, informándole de la situación.
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Al revisar a la mujer, los médicos constataron que había fallecido momentos antes de llegar al hospital, donde se hicieron presentes otros hijos de la anciana. Ellos se pelearon con su hermano en la puerta del lugar y lo acusaron de haber golpeado a la mujer. Por lo tanto, les pidieron a los médicos que examinaran detenidamente el cadáver de Gerez.
Así fue cómo uno de los doctores constató así que la mujer tenía golpes, por lo que dio aviso inmediato a la Policía y a su vez tomó conocimiento del hecho el titular de la Unidad Fiscal de La Banda, Pablo Moya. Un especialista de la fuerza también revisó el cadáver de la víctima y constató que tenía un "hematoma gigante en región mentoniana y maxilar, probable fractura (a corroborar), lesiones probables de defensa en ambas muñecas con equimosis y hematoma en rodilla derecha".
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De inmediato, el fiscal ordenó que el cuerpo de la mujer fuera trasladado a la morgue y que la policía detuviera a su hijo Aldo, quien según sus hermanos podría ser el autor de las heridas. El acusado quedó alojado en la Comisaría 13 mientras el representante del MPF aguarda el informe del forense.
Al parecer, la mala relación entre la víctima y su hijo era de público conocimiento, ya que fue ella misma quien hace tiempo lo había denunciado ante la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar.