Amenazas de bomba en escuelas privadas de la Ciudad y el conurbano
Se hicieron por medio de correos electrónicos, aunque no se detecaron explosivos en ningún establecimiento.
Alrededor de una decena de escuelas privadas, tanto del ámbito de la Ciudad como de la provincia de Buenos Aires, recibieron hoy amenazas de bomba, por lo que debieron ser evacuadadas, aunque no se detectó ningún elemento explosivo.
A través de un correo electrónico las autoridades de las escuelas fueron notificadas de la supuesta presencia de ese tipo de artefactos, por lo que dieron aviso a las fuerzas policiales y luego evacuaron los edificios, tal como lo establece el protocolo.
Intervino en cada operativo personal del SAME, bomberos, policía y expertos en explosivos de esa fuerza.
El texto, titulado "Hoy va a ser el día", decía lo siguiente: "Siempre hemos esperado este día. La podredumbre viene literalmente de todas partes. Cada año hay muchos ataques a escuelas en todo el mundo, una respuesta a una sociedad podrida. Creado desde el nacimiento del hombre, la esencia misma del mal. La escuela hace esclavos perfectos. Intentaste hacernos tan insignificantes como tú. Siempre pensamos en el día en que decidimos salir de las sombras".
Además, hace mención al "tiroteo de Belgrado", ocurrido recientemente en Serbia, y con especial hincapie en "un valiente guerrero de 13 años", responsable de la matanza de sus compañeros de clase.
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"El odio ya no se puede contener. Todo lo que sentirás antes de morir son fragmentos que perforan tu cuerpo. El olor de las balas de plomo que te dispararon. El sonido de un disparo será una larga vida para ti. Te quemaremos en queroseno. Ahogados en sangre. Somos su comienzo, tu doloroso final", concluye el correo.
Entre las instituciones afectadas aparecen el Villa Devoto School, la escuela italiana Cristoforo Colombo, el Nightingale School y el Colegio San Mateo, en el ámbito de la Ciudad, y también en el St. George's de Quilmes, al sur del conurbano; Northland y William Claxton, ubicados en la zona norte de esa región.
La investigación quedó a cargo del fiscal Alejandro Musso, especialista en Delitos Informáticos, quien intentará dilucidar de donde surgieron los mensajes amenazantes y quienes fueron los responsables.