El costo de hacer una pizza casera varía significativamente entre Argentina, Uruguay y Brasil en 2024. Cada una tiene su impronta de acuerdo a quien la haga y los productos que utilice.

Una diferencia sustancial, primero entre una pizza casera y otra de pizzería o restaurante es que la masa hecha en casa puede tener un sabor más auténtico o personalizado, dependiendo de la receta que se utilice. También varía si es baja o alta la masa, y se puede experimentar con diferentes tipos de harinas. El proceso de fermentación casera también puede influir en el sabor.

Al cocinar en casa, el control de la temperatura y el tiempo de horneado depende de uno y el horno. Si es uno convencional, es posible que la pizza no adquiera la textura crujiente que tendría en un horno a leña, lo que puede afectar la textura y el sabor de la pizza. Los ingredientes también influyen, pero la masa es primordial.

El saber y la textura de la masa casera es incomparable. Foto: Agencia Noticias Argentinas - Viva la cocina.
El saber y la textura de la masa casera es incomparable. Foto: Agencia Noticias Argentinas - Viva la cocina.

Ahora bien, hablando de ingredientes, ¿Cuáles son los costos en Argentina, Uruguay y Brasil para hacer la pizza casares que más te gusta?

El resumen de precios se basa en los siguientes ingredientes: harina, levadura, salsa de tomate, queso y otros opcionales como aceitunas o fiambres, huevo, anchoas, palmitos, rúcula, entre otros.

En Argentina el costo aproximado ronda 5,500 - 7,000 pesos, dependiendo de la calidad y cantidad de ingredientes y el comercio donde se los compre.

Si la hacemos en Uruguay de costo, siempre aproximado tendremos que abonar unos 400 - 500 pesos uruguayos.

Y en Brasil ronda entre 20 - 25 reales.

Lo cierto que hacer una pizza casera es más accesible en Brasil que en Uruguay o Argentina, aunque la diferencia puede variar según marcas y ubicaciones específicas. En todos los países, optar por ingredientes básicos y comprarlos en supermercados reduce costos. Si se busca precios precisos para un cálculo más detallado, eso puede ayudar a personalizar la receta según las necesidades y gustos del comensal.

Ideas para hacer pizzas casares

Estas tres opciones incluyen dos clásicos como la Margarita y la Cuatro Quesos, y una pizza especial de pollo al pesto que le dará un toque distinto y sabroso al repertorio de pizzas caseras.

Pizza Margarita (Clásica)

  • Ingredientes: masa, salsa de tomate, mozzarella fresca, hojas de albahaca y aceite de oliva virgen extra.
  • Preparación: precalentar el horno a 250°C, extender la masa sobre una pizzera, cubrir con una capa uniforme de salsa de tomate, colocar la mozzarella en trozos o en rodajas, hornear la pizza durante unos 10-15 minutos o hasta que la masa esté dorada y el queso se haya derretido. Luego, añadir las hojas de albahaca al sacar la pizza del horno y rociarla con un poco de aceite de oliva.

Pizza Cuatro Quesos (Clásica)

  • Ingredientes: masa, salsa de tomate o sin salsa (opcional), mozzarella, queso azul, parmesano rallado y ricota o cheddar.
  • Preparación: precalentar el horno a 250°C., estirar la masa sobre la bandeja y cubrir con una capa ligera de salsa de tomate (o directamente sin salsa), añadir la mozzarella rallada como base, esparcir los otros quesos (azul, ricota y parmesano) de manera uniforme y llevar al horno durante 15 minutos, o hasta que la masa esté crujiente y los quesos se hayan derretido completamente. Servir de inmediato con un toque de pimienta negra si gusta.

Pizza de Pollo al Pesto (Especial)

  • Ingredientes: masa, salsa pesto, pechuga de pollo (desmenuzada o en tiras), mozzarella, piñones tostados y tomates cherry (opcional).
  • Preparación: precalentar el horno a 250°C, extender la masa de pizza sobre la bandeja y, en lugar de salsa de tomate, usar una capa generosa de pesto, colocar la mozzarella rallada y distribuir las tiras de pollo sobre la pizza. Hornear durante 15 minutos o hasta que la masa esté dorada y el queso se derrita. Al sacar la pizza del horno, añadir los piñones tostados y los tomates cherry cortados por la mitad. Servir caliente, con un toque extra de pesto.