Voces a favor y en contra: sigue la polémica por los aumentos de sueldo en el Congreso
La diputada Fernanda Vallejos encendió la mecha al señalar que "es una vergüenza" que los legisladores cobren las dietas "más bajas de la región". Del Caño contestó que "vergüenza es la jubilación mínima de 23.000 pesos" y "el salario mínimo de indigencia".
Luego de que la diputada del Frente de Todos Fernanda Vallejos encendiera la polémica al defender el aumento de los sueldos de legisladores nacionales, varios colegas del Congreso salieron a criticar esa postura.
La diputada kirchnerista había argumentado que las dietas que perciben los parlamentarios argentinos son las "más bajas de la región" y que esa situación "casi que da vergüenza".
Las declaraciones de Vallejos levantaron mucho revuelo, y entre los muchos que reaccionaron estuvo el diputado del Frente de Izquierda Nicolás del Caño.
El dirigente del PTS contestó que "vergüenza es la jubilación mínima de 23.000 pesos" y "el salario mínimo de indigencia que firmó el gobierno".
"Eso hay que aumentar ya, no la dieta de diputadas y diputados", agregó.
Por su parte, el diputado radical José Luis Riccardo le pidió a Cristina Kirchner y a Massa que "deroguen inmediatamente el aumento obsceno y provocador de 40% a los Senadores y Diputados que decidieron solos arbitrariamente".
El puntano afirmó que obraron de esa manera "sin tener cuenta lo que está sufriendo el pueblo y los millones de argentinos y argentinas que no tienen trabajo, ni los millones de jubilados que no llegan a fin de mes".
"Ningún aumento ahora y en el futuro de los empleados públicos ni los cargos políticos de la Nación y las Provincias debería ser mayor al aumento de los jubilados de jubilación mínima", consideró.
Días atrás, la presidenta del Senado, Cristina Kirchner, y su par de Diputados, Sergio Massa, anunciaron que habían llegado a un acuerdo con los gremios del sector para aumentar los haberes en un 40%, en cuatro etapas.
Luego desde Presidencia de Diputados aclararon que ese nivel de incremento salarial estaba confirmado para el personal legislativo, pero no para los representantes de las distintas fuerzas políticas en las bancas del Congreso.
Durante el año pasado, las dietas de los legisladores estuvieron congeladas por resolución de ambas cámaras en el marco de la "emergencia social" que se había declarado por ley.
En enero pasado, y con la continuidad de la pandemia como telón de fondo, se prorrogó el congelamiento de los haberes.
Esta situación se mantuvo hasta el último anunció en el que se acordó el aumento del 40% para personal legislativo.
No quedó claro, sin embargo, si ese ajuste también contemplaba la dieta de los legisladores, la cual suele estar atada a la paritaria de los gremios del sector.
En este marco, el senador Esteban Bullrich se manifestó en contra del aumento y dijo que va a donar el plus salarial que cobre a la compra de medicamentos contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).
Por su parte, el ex ministro de Interior y Transporte Florencio Randazzo describió la crisis que atraviesa el país y se preguntó, a propósito del aumento salarial del 40%: "¿Perdieron el sentido común o el corazón?".