La jueza de instrucción Alejandra Provitola, quien investiga a Braian Cufré y Fabricio Alvarenga por una denuncia de abuso sexual por hechos cometidos en 2017, pidió a su par de Tucumán la otra causa por similar delito que pesa sobre el primero de ellos y otros tres jugadores de Vélez. 

La investigación contra Alvarenga y Cufré es reciente y la fiscal de instrucción Paula Asaro ha pedido una batería de medidas de prueba. Ella, junto a la jueza Provitola, vienen haciendo varias medidas y ahora la causa está bajo secreto de sumario. 

Entre las medidas, la jueza pidió a Tucumán la causa que los tiene detenidos a Cufré y otros dos jugadores. 

La denuncia en Buenos Aires fue presentada la semana pasada por una joven de 25 años en una comisaría del barrio porteño de Palermo y quedó a cargo de un juzgado en lo penal de Capital Federal y, en la misma presentación, acusó también por abuso sexual a Fabricio Oscar Alvarenga. 

Según fuentes judiciales, la joven tenía una relación sentimental con Cufré, quien en 2017 le propuso hacer un trío sexual con Alvarenga a lo que ella se había negado.

Pero un día determinado, la joven fue a la casa de Cufré y allí habría sido abusada sexualmente, tal cual indica en la denuncia hecha. 

Mientras tanto Cufré, al igual que Abiel Osorio y José Florentín, están con arresto domiciliario y tobillera electrónica al ser acusados por un abuso sexual cometido en Tucumán cuando estaban concentrados en un hotel. La situación podría mantenerse hasta el juicio oral y público el cual aún no tiene fecha. 

En el caso, la jueza Eliana Gómez Moreira rechazó el recurso de impugnación presentado por los abogados defensores de los tres futbolistas. Florentín y Cufré fueron imputados por abuso sexual con acceso carnal, agravado por dos o más personas, mientras que Osorio es acusado de abuso sexual simple.

Por su parte, Sebastián Sosa, imputado como partícipe secundario, esperará el veredicto en libertad condicional, con la obligación de presentarse cada 15 días en Tucumán y no podrá salir del país por 90 días.

Según la denuncia hecha en Tucumán por una joven de 24 años, ella fue contactada por Sosa y, cuando fue a la habitación del hotel en el que estaban concentrados, fue abusada sexualmente.