Alberto Fernández, sobre el vacunatorio VIP: "No voy a dejarme aturdir por críticas maliciosas que responden a intereses inconfesables"
El Presidente abre el período de sesiones ordinarias. Es transmitido por cadena nacional.
El presidente Alberto Fernández se refirió al escándalo del vacunatorio VIP y remarcó que tomó "las decisiones correspondientes" cuando observó los errores, en tanto que aseguró que no se dejará "aturdir por críticas maliciosas que responden a intereses inconfesables".
"Hemos iniciado el mayor operativo de vacunación de la historia argentina. En este plan hay prioridades muy claras: las reglas se deben cumplir. Si se cometen errores, la voluntad de este presidente es reconocerlos y corregirlos de inmediato", sostuvo Fernández durante su discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso.
En ese sentido, indicó que "cuando se dijo que estas reglas habian sido transgredidas", se encargó de "recavar la información pertinente" y aunque "en lo personal" le causó "mucho dolor", tomó "las decisiones correspondientes.
"Ningún gobierno de la tierra se puede arrogar el privilegio de no cometer errores, pero todo gobierno sensible sí tiene la obligación de corregir esos errores para desterrar cualquier indicio de privilegio o falta de solidaridad", subrayó el primer mandatario.
En tanto, señaló que no llegó a la presidencia "para ser sordo a las críticas bienintencionadas", como "tampoco para dejarme aturdir por críticas maliciosas que responden a intereses inconfesables de poderes económicos concentrados que buscan sembrar la fractura, la polarización y la discordia entre el pueblo argentino, profundizando las heridas de la sociedad".
"La pirotecnia verbal solo nos aturde. Algunos sectores se han esforzado por generar incertidumbre y desánimo. Nos acusaron de infectadura, blasfemaron contra la vacuna y hasta nos acusaron penalmente por envenenar a la población", remarcó el jefe de Estado.
Sobre las críticas de la oposición, manifestó que "todas sus políticas condujeron a estrepitosos fracasos". "Guardo esperanzas de que algún día hagan un mea culpa, entierren el odio que cargan y ayuden a levantar los cimientos del país que han derrumbado", señaló. Y concluyó: "A quienes sistemáticamente bombardean esta gestión sin la menor objetividad, les reconozco la perseverancia pero les recuerdo que por ese camino no van a lograr su propósito".
El mandatario nacional se tomó una pequeña pausa para cruzar al diputado de Juntos por el Cambio Fernando Iglesias, quien lo interrumpió varias veces con comentarios a los gritos sobre sus palabras.
"Tuvo cuatro años para hablar, por qué no me deja hablar a mí", le reclamó Fernández al legislador del PRO, que se encuentra en el grupo de legisladores presente en el recinto.
La respuesta del Presidente se produjo cuando hablaba de la situación económica del país y la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Tanto Iglesias como su par Waldo Wolff hicieron comentarios con voz alta mientras el jefe de Estado brindaba su discurso.