El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, repartió su jornada entre su rol como mandatario de la Ciudad, donde supervisó una obra en el Arroyo Cildañez, y su tarea como referente de Juntos por el Cambio, ya que volvió al Conurbano para hacer una recorrida por Quilmes junto al candidato a diputado nacional Diego Santilli.

Acompañado por el secretario de Transporte y Obras Públicas, Juan José Méndez, el referente del PRO hizo un repaso sobre el estado de avance del Ramal Cruz del Arroyo Cildáñez, una obra que comenzó a ejecutarse en agosto y que se estima que será inaugurada en diciembre próximo.

Con 825 metros de extensión, la obra se está ejecutando sobre Avenida Cruz entre Escalada y Larrazábal con el objetivo de reforzar la red de desagües y completar la infraestructura del Barrio Papa Francisco. Para garantizar el funcionamiento habitual de la avenida, del servicio del Premetro y de las líneas de colectivo que circulan por el Metrobús Sur, las tareas se están llevando adelante con una tunelera que trabaja ocho metros por debajo de la superficie, informó el Gobierno porteño. Los trabajos en el Arroyo Cildáñez reducirán el riesgo de inundaciones en Soldati y el Bajo Flores y beneficiarán a más de 120 mil vecinos de la Comuna 8.

Además, Rodríguez Larreta estuvo en el partido bonaerense de Quilmes, en donde realizó una recorrida junto a Santilli y el referente local y postulante a diputado provincial Martiniano Molina: en ese contexto remarcó la importancia de la fiscalización en las elecciones del 14 de noviembre. "Les pedimos a todos que nos ayuden, a esos vecinos que les preocupa, que nos ayuden, que se anoten como fiscales. Necesitamos más fiscales, necesitamos que se comprometan. Es un día, y es un día para garantizar la democracia, para garantizar el cambio, para garantizar el triunfo de Diego, de Martiniano, de todos", explicó el jefe de Gobierno de la Ciudad.

A la vez, recordó su gira por Washington y contó que en el exterior ven "con mucha preocupación" la falta de un plan de gestión nacional. "El hecho de no tener un plan, de no tener un rumbo, de no tener en claro a dónde vamos, de una inflación que no baja, un Gobierno que a la mañana dice una cosa, a la tarde dice otra: en el exterior nos ven con mucha preocupación. Yo sigo transmitiendo un mensaje optimista con respecto a la Argentina porque más allá de los problemas que pueda haber en el corto plazo, estoy convencido de que tenemos un gran potencial", remarcó. 

Por su parte, Santilli afirmó que "hay que seguir sumando para poder cambiar la historia de la Provincia" y señaló que la principal preocupación de los vecinos es la inseguridad. "Hay que abordar los temas de fondo. No creo que haya que abordarlos de manera simplista. La sociedad lo que quiere es que verdaderamente se ocupen de que puedan vivir en paz, de que puedan salir de sus casas a las cinco de la mañana y no tener miedo a que le pase algo, a que la roben, que es lo que le pasa a la mayoría de los vecinos en todos los barrios de la Provincia", expresó. Y concluyó: "La sociedad está esperando de la dirigencia en general que la escuche, que la entienda y que enfrente los problemas y los resuelva".