La Cámara Federal de Casación rechazó un intento del juez federal de Mendoza Walter Bento y de su esposa, Marta Isabel Boiza, contra el procesamiento dictado por los tribunales federales de la provincia en una causa por supuesta corrupción.

El máximo tribunal penal del país desestimó un planteo de la defensa de ambos imputados, a cargo del abogado Mariano Cúneo Libarona.

Bento y su mujer intentaron llegar en revisión ante la Corte Suprema.

Pero los jueces Juan Carlos Gemignani y Eduardo Riggi consideraron que “en el recurso examinado se ha invocado que lo resuelto provocó el quebrantamiento de derechos y garantías de raigambre constitucional, lo cual no determina per se la procedencia formal de la vía intentada”.

“Para ello se requiere que el impugnante demuestre cómo operó efectivamente el quebrantamiento alegado, lo cual no se verifica en el remedio federal analizado”, replicaron.

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“Para que prospere la impugnación con ese respaldo, es menester que se demuestren defectos graves en la decisión recurrida, que la descalifiquen como acto jurisdiccional válido, lo cual el impugnante no ha conseguido acreditar”, fundamentaron.

El tercer juez de la Sala, Mariano Borinsky, había optado por conceder el recurso extraordinario.

Bento fue procesado por el también juez federal de Mendoza Eduardo Puigdéngolas, junto con otras 22 personas.

A todos se les imputan los delitos de “cohecho, enriquecimiento ilícito, falso testimonio, asociación ilícita, lavado de activos de origen delictivo, omisión y retardo de justicia, prevaricato, violación de deberes de funcionario público y violación de secretos”.

Bento está sospechado de liderar una  asociación ilícita que solicitaba dinero a cambio de beneficios judiciales.