Luego de la desprolija salida de Nicolás Posse del Gobierno, tomó por sorpresa la decisión del presidente Javier Milei de mantener al hasta entonces secretario ejecutivo de Jefatura de Gabinete, José Rolandi. 

Hombre clave del extitular de ministros y encargado de llevar adelante de los detalles técnicos de los proyectos legislativos, el funcionario se ganó su permanencia gracias a la labor que llevó adelante junto a la secretaria de planeamiento, María Irazabal Murphy, en plena negociación por la Ley Bases en el Congreso. 

Con nula trayectoria política, Rolandi conoció a Posse años atrás en su paso en la Corporación América, el grupo liderado por el empresario Eduardo Eurnekian -donde trabajó también el propio Milei- y fue elegido para formar parte del equipo diseñado por el exfuncionario en su desembarco en la administración libertaria. 

En la actualidad, se desempeña como director de YPF, cargo que ejerce ad honorem. Durante su primer nombramiento en el Poder Ejecutivo, la firma petrolera le abonaba un salario proporcional al de un ministro, mientras que en su nueva designación su sueldo saldrá del Estado. 

El ingeniero recibido del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) en 2002, cuenta con una basta trayectoria en el sector privado que va desde sus participación en el proyecto del Parque Eólico Carape I y II, su paso por la Compañía General de Combustibles (CGC), hasta la fundación de empresas de Inteligencia Artificial.