El Poder Ejecutivo pondrá a consideración de los gobernantes el nuevo Consenso Fiscal 2022 que de inmediato generó preocupación en el sector industrial ya que se incrementará la presión tributaria en el sector productivo al eliminar la reducción progresiva de ingresos brutos establecida originalmente en 2017. A su vez, los industriales quedarán exentos del impuesto en 2022 de acuerdo a lo firmado en 2017 y también mantiene un tope de alícuota de 1,5%.

Esta tarde, el presidente Alberto Fernández busca conseguir un consenso político que muestra positividad para las negociaciones con el FMI. Alrededor de a las 17 encabezará junto al jefe de Gabinete, Juan Manzur, y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, un encuentro con gobernadores y vicegobernadores en Casa Rosada.

Pero los empresarios sostienen que estos números perjudican la competitividad de las empresas y su costo es afrontado por todos los consumidores, impactando en mayor medida en los sectores más vulnerables que destinan mayor parte de sus ingresos al consumo.

“El contenido e implicancias de este Consenso Fiscal 2022 va en el sentido contrario de las medidas que se necesitan para impulsar la reactivación económica y la inversión productiva. Este acuerdo de la Nación y gobernadores de todo el espectro político debería ir en el sentido de evitar incrementos de la presión tributaria al sector transable, en lugar de promover un impuesto distorsivo que tiene numerosos impactos negativos ya conocidos para la economía”, expresó Daniel Funes de Rioja, presidente de la UIA.

A todo esto, se suma un costo administrativo muy elevado por ser el impuesto con mayor cantidad de regímenes de recaudación del país y con heterogeneidad de características en las distintas jurisdicciones. La existencia de diversos regímenes de recaudación del impuesto sobre los ingresos brutos, además, hace que la alícuota efectiva que enfrenta cada empresa sea mayor que la que grava su actividad, ocasionando saldos a favor de difícil recuperación, que pierden valor con el paso del tiempo producto de la inflación que no se actualizan.

Otro de los aspectos preocupantes en el nuevo documento del Consenso Fiscal es que tiene un impacto negativo en las exportaciones argentinas, por el costo incremental que genera en la producción local. En los sectores transables, como el industrial, la baja del impuesto a los ingresos brutos es muy relevante para la competencia con productos extranjeros, tanto al exportar como para competir frente a las importaciones en el mercado interno.

Todos estos puntos indican el enojo por parte de la Unión Industrial Argentina con el nuevo documento que Alberto Fernández busca que se firme esta tarde para mostrar un carácter positivo ante el Fondo Monetario Internacional que ya se señaló su enojo por la falta de acuerdo en el Presupuesto 2022.