Pidieron el juicio oral para el último policía detenido por el crimen de Lucas González
Se trata de Facundo Agustín Matías Torres, acusado de haber aportado un arma falsa para simular un enfrentamiento que nunca existió.
Los familiares del joven futbolista de Barracas Central Lucas González, asesinado por una Brigada de la Policía de la Ciudad, pidieron el juicio oral para el último detenido, Facundo Agustín Matías Torres, acusado de haber aportado un arma falsa para simular un enfrentamiento que nunca existió.
El abogado Gregorio Dalbón, quien representa a la querella, formuló el pedido en plena feria judicial y después de que fuera rechazado un intento de la defensa de Torres para que la Cámara de Casación porteña revisara su procesamiento.
En su pedido de elevación a juicio, de unas 25 páginas, Dalbón hizo hincapié en las pruebas surgidas del propio expediente y de la incriminación de uno de los imputados durante el juicio oral, quien sindicó a Torres como quien aportó el arma de juguete.
Semanas atrás un tribunal oral condenó a prisión perpetua a tres policías de la Ciudad y a penas de entre cuatro y ocho años de cárcel a un grupo de acusados de encubrimiento del crimen.
Torres no fue parte de ese juicio, por lo cual en su caso se deberá realizar un nuevo proceso.
“Para nosotros es clave esta situación en la que se determinaron los horarios y recorridos realizados por Torres y se logró tomar por medio de las cámaras de seguridad su desplazamiento al mando del motovehículo y de Gabriel Alejandro Isassi (condenado a perpetua por el crimen, ndr) como su acompañante detrás”, sostiene la acusación.
“Esto desde la esquina de las Avenidas Iriarte y Vélez Sarsfield donde fue la balacera sufrida por los chicos hasta la Comisaría Vecinal 4D donde se detuvieron y el primero ingresó rápido y luego regresar y reanudar la marcha en dirección a Alvarado y Meana a 50 metros del automóvil de las víctimas donde descendió Isassi”, añade el documento.
“Finalmente, los dos regresaron juntos al punto de partida, demostrativo de que Torres a poco de la lluvia de balas de sus pares, se dirigió junto a uno de ellos hasta la seccional policial, donde ingresó a tomar el arma de juguete y entregársela a su acompañante, a quien trasladó hasta al Volkswagen Surán (el vehículo de las víctimas, ndr) para colocar en la parte trasera dicha arma de utilería alterando la escena para encubrir el delito previamente cometido”, resumió el documento.