Fabián Rodríguez Simón, el ex asesor del ex presidente Mauricio Macri, rechazará hoy el pedido de extradición de la jueza argentina María Servini e insistirá ante la Justicia uruguaya en que es un “perseguido” y por eso solicitó asilo político en el país vecino.

“Pepín” Rodríguez Simón fue convocado a una audiencia que tendrá lugar esta tarde ante Adriana Chamsarián, titular del Juzgado Letrado Especializado en Crimen Organizado de Primer Turno de la ciudad de Montevideo.

La jueza uruguaya dispuso la convocatoria después de que le fuera notificada la orden de captura internacional librada por la jueza María Servini, que aún no se concretó porque está pendiente de resolución el pedido de asilo que presentó el abogado a principios de mayo pasado.

Rodríguez Simón tiene la posibilidad de aceptar el pedido de extradición (en cuyo caso regresará de inmediato a la Argentina y quedará detenido a disposición de Servini) o rechazarlo, lo que dará pie al inicio del juicio de extradición.

La jueza tuvo por presentada “la solicitud de condición jurídica de refugiado ante la Comisión de Refugiados y los restantes documentos individualizados en el escrito introductorio” con el que Rodríguez Simón formalizó el pedido.

Según la legislación uruguaya, cuando chocan dos reclamos antagónicos, el pedido de refugio y una orden de detención de un tribunal extranjero, la primera instancia que debe adoptar una decisión es la judicial. Por eso interviene la jueza Chamsarián, mucho antes que el gobierno uruguayo aunque, en definitiva, será éste el que adoptará la decisión final, aún en caso de un fallo judicial que apruebe la extradición.

En la audiencia de hoy “deberán comparecer la persona requerida    asistida de defensor, el abogado del Estado requirente y el Ministerio    Público”, establece la legislación uruguaya. Ello significa que Rodríguez Simón deberá estar presente en la audiencia, acompañado por un abogado uruguayo que lo representa.

A pedido de Rodríguez Simón, la jueza podría disponer una postergación de la audiencia por hasta 24 horas “para que el defensor y la persona requerida puedan    examinar los fundamentos de la solicitud”. Pero una vez reanudada la audiencia, la jueza resolverá hoy mismo el planteo, “con arreglo a la ley más favorable para el    requerido”. Esa medida es apelable ante una instancia superior del Poder Judicial de Uruguay.

El otro escenario posible es que la jueza advierta “defectos formales” en el pedido de extradición, situación ante la cual deberá requerir a la Justicia Argentina “que se subsanen en un plazo que no podrá superar los treinta días contados desde la fecha de la audiencia”. Si esos defectos formales no fueran subsanados, la causa quedará archivada.