El exembajador argentino ante Naciones Unidas, EE.UU. y Portugal, Jorge Argüello, aseguró este jueves que “cuando el presidente Javier Milei proclama esa suerte de encuadramiento automático detrás de los Estados Unidos y de Israel, está pensando en un alineamiento automático detrás de Donald Trump". 

"Ese encuadramiento va más dirigido a la persona de Donald Trump que a los EEUU”, precisó.

El exfuncionario participó de la 62 Asamblea General de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) que se realiza hasta el viernes en la ciudad de Posadas. 

Ante directores y editores de medios de todo el país analizó la situación de los Estados Unidos de cara a las elecciones presidenciales y la relación del actual Gobierno con dicho país.

“Es difícil de predecir que puede pasar en la relación con el FMI”, dijo Argüello respecto de la suerte que pueda tener el Gobierno en caso de que Trump fuera elegido como el próximo presidente de los Estados Unidos. 

“El FMI no decide en contra de lo que quiere EEUU por el peso que tiene ese país en el Fondo”, dijo al tiempo que recordó que mientras en su presidencia se otorgó a la Argentina el crédito más importante de la historia del organismo también fue Trump quien le cerró a la Argentina la importación de biodiesel.

"Un negocio de 1,4 billones de dólares y lo cerró de la noche a la mañana”, precisó.

Aseguró que Milei “debe especular con recibir fondos frescos del FMI para lo que es necesario el visto bueno de EEUU”, aunque subrayó que aún es incierto el resultado de la elección y con ello también la posibilidad de que un eventual triunfo de Trump ayude a la Argentina. 

Sin embargo apuntó que la mirada de Milei “está puesta más en un triunfo de Donald Trump”.

Aún así, recalcó que entre ellos hay grandes diferencias: “Trump es proteccionista mientras que Milei es todo lo contrario”.

Argüello resaltó que en estos momentos las encuestas dan resultados muy parejos y se refirió a la grieta que hay en los Estados Unidos.

“Los argentinos creemos que somos los campeones mundiales de la grieta, la grieta social, la grieta política y no nos damos cuenta que este fenómeno de fragmentación primero y de polarización social y política después se está verificando en la mayoría de las sociedades occidentales, con distinto énfasis”, analizó.

“Argentina vive la grieta de una forma bastante superficial, pero la grieta que hay en EEUU está enraizada en los valores fundantes de esa sociedad. Se discute por ejemplo si la educación cristiana debe ser obligatoria en los colegios públicos, del aborto, de la inmigración de un país que fue hecho por inmigrantes”, avanzó.

Por último respecto de las expresiones de derecha que están surgiendo en el mundo y la figura del presidente argentino en la escena internacional indicó que “Milei es la expresión de ese proceso".

"La palabra que domina la escena internacional es la incertidumbre, estamos navegando aguas desconocidas, sin brújulas, aguas peligrosas y no tenemos mapa de rutas”, cerró.