La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, de militancia en la agrupación La Campora, encabezó la apertura del 140º período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, oportunidad en la que responsabilizó al gobierno de Mauricio Macri por la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI)

Señaló que el crédito tomado por 44.000 millones de dólares es "una deuda impagable que pesará muchos años sobre la espalda de los argentinos por única responsabilidad de Mauricio Macri".

"La sociedad en 4 años les dijo basta en primera vuelta. Toda la dirigencia política debe aprender de esa experiencia. No puede haber proyecto de país con la enorme mayoría de nuestra gente cayéndose del mapa. Como alguna vez ha dicho Máximo Kirchner: quienes pretendan gobernar deben saber que los números deben cerrar siempre con la gente adentro. De lo contrario, ya hemos visto cómo termina la historia", agregó la intendenta.

También puntualizó en que "el gobierno macrista ha sido realmente un fracaso para la Argentina" y la gente votó al Frente de Todos "para que seamos mejores que ellos".

"Eso sería conformarse con poco. Alcanzaría con no aumentar las tarifas 3 mil por ciento, con no cerrar 20 mil Pymes. Alcanzaría con devolverle los medicamentos a los jubilados como ya hemos hecho, o con volver a entregarles las computadoras a los pibes y pibas como estamos haciendo. Pero no. Nos eligieron para más que eso. Nos votaron para ser mejores, pero no mejores que el macrismo sino mejores de lo que fuimos nosotros mismos entre el 2003 y
2015. No podemos compararnos con el gobierno anterior. Realmente creo que tenemos que poder compararnos con los gobiernos de Néstor y de Cristina, trabajar para construir incluso días más felices de lo que fueron aquellos para nuestra gente", enfatizó.

"La sociedad espera más de nosotros. Que hay que trabajar mucho, después de cuatro años de Macri y dos de pandemia, para poder poner de pie a la Argentina como lo hizo Néstor después del infierno del 2001. Para lograrlo hacen falta hombres y mujeres decididas, con coraje y voluntad política que gobiernen con la verdad de cara a la gente. Tenemos que redoblar los esfuerzos para lo que viene. Pero que no le quepa ninguna duda a nadie: el camino de la transformación en Quilmes empezó y no va a detenerse".