El ex ministro de Justicia y Seguridad porteño Marcelo D'Alessandro rompió el silencio tras el crimen del ingeniero Mariano Barbieri en el barrio porteño de Palermo y reclamó por una Ley Penal Juvenil. Además, expresó: "Si te alejas de la gente, termina pasando que el trabajo que se hacía se va desandando".

En diálogo con Radio Rivadavia, el exfuncionario aseguró que tiene una buena relación con su sucesor, Eugenio Burzaco, y planteó que "es anecdótico" si se encontraba en Estados Unidos. 

"Es más fácil buscar un culpable. Con la tecnología y el profesionalismo, la Policía de la Ciudad lo va a detener y nos vamos a dar cuenta que esta persona tiene muchas alertas tempranas", reafirmó en una entrevista para el programa "Si Pasa, Pasa", conducido por el periodista Ignacio Ortelli. 

En la misma línea, remarcó: "A veces recae todo sobre el policía, pero acá debe funcionar una cadena. Las personas, los menores, siempre dieron alertas tempranas y nunca funcionó como se debería funcionar. Inició seguro por una contravención y terminó con un daño irreparable".

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D'Alessandro que dejó su cargo en marzo, expresó además que la salida para combatir la inseguridad no es ubicar efectivos "en todas las esquinas" sino impulsar una Ley Penal Juvenil que permita regular los casos que involucran a menores de edad en situaciones delictivas.

"Todos dicen no persigamos a los pobres chicos, y no son chicos peligrosos, son chicos en peligro que terminan o matando o muriendo en un enfrentamiento", afirmó, y continuó: "La clase política no se puede sentar a definir una ley penal juvenil para protegerlos a ellos y a los terceros"

Para el exministro, sin la legislación se continúa "barriendo el problema debajo de la alfombra" por lo que pidió actuar ante mínimos episodios de inseguridad. Al respecto, ejemplificó que en la ciudad de Buenos Aires, la Policía local tiene la orden de dictar una contravención a la persona que encuentre portando un arma blanca, como puede ser un cuchillo, a pesar de que no lo haya utilizado.

"En diferentes situaciones, a trapitos o personas en situación de calle se les encuentran un cuchillo y eso es una contravención, pero después dicen que la Policía los persigue y estigmatiza", argumentó y concluyó: "Esa persona que lleva el cuchillo, a cuánto está de agarrarlo y robar. Después es fácil decir que la policía no hizo lo que tiene que hacer".