Durante su gestión al frente de la Casa Rosada, Mauricio Macri firmó un total de 73 decretos de necesidad y urgencia (DNU), mientras que el actual Presidente, Alberto Fernández, lleva rubricados 10 desde su asunción.

De acuerdo al inciso número 3 del artículo 99 de la Constitución Nacional, el jefe de Estado está habilitado a dictar este tipo de decretos "solamente cuando circunstancias excepcionales hicieran imposible seguir los trámites ordinarios previstos" por la Carta Magna para la sanción de las leyes.

También establece que debe hacerlo "en acuerdo general de ministros que deberán refrendarlos, conjuntamente con el jefe de Gabinete".

Sin embargo, el texto aclara que los DNU no pueden ser en temas que "regulen materia penal, tributaria, electoral o de régimen de los partidos políticos".