Las principales figuras de la UCR a nivel nacional y de la provincia de Buenos Aires se mostrarán alineadas detrás del candidato a diputado nacional de Juntos Facundo Manes en un acto que busca mostrar a un radicalismo "revitalizado" que se prepara para pulsear con sus socios del PRO y la Coalición Cívica por el liderazgo del espacio luego de las legislativas.

Sin romper el pacto de no agresión que firmaron todos los referentes de Juntos por el Cambio para la campaña que culminará con las elecciones del 14 de noviembre, el radicalismo se reunirá este jueves en el microestadio de Ferro para un evento que tendrá a Manes como orador de cierre y al que asistirán gobernadores y dirigentes de peso.

El acto es organizado por la UCR bonaerense que encabeza Maximiliano Abad y participará el presidente del Comité Nacional del partido, Alfredo Cornejo; los gobernadores de Jujuy, Gerardo Morales, y de Corrientes, Gustavo Valdés; el senador nacional por la Ciudad de Buenos Aires Martín Lousteau; el referente partidario Ernesto Sanz y casi toda la plana mayor del radicalismo.

La idea de los popes de la UCR es empezar a mostrar la "renovación" y "modernización" del llamado "partido centenario" y destacar los "logros políticos" conseguidos, principalmente, en la provincia de Buenos Aires, según indicaron fuentes del espacio a NA.

En este sentido, uno de los objetivos de corto plazo es mantener en el centro de la escena a Manes, su candidato en el distrito, para que el referente del PRO Diego Santilli, que encabeza la lista de Juntos en la Provincia, no le haga sombra.

Ello obedece, a su vez, el objetivo de mediano plazo que tiene que ver con robustecer la presencia radical dentro de la coalición opositora frente a la puja con el PRO por la centralidad, razón por la cual se mostrarán junto al candidato las figuras estelares del radicalismo, incluso las que compiten entre sí.

Es el caso de Morales y Lousteau, que se mostrarán juntos a pesar de los dardos que cada tanto se tiran públicamente como parte de la pelea que mantienen por la presidencia de la UCR, que se definirá en diciembre.

Si bien ningún radical deja de lado la interna, en el partido todos coinciden en la necesidad de cerrar filas para disputar los lugares clave dentro de la alianza, con el horizonte de las presidenciales de 2023 para las cuales ya se anotan dirigentes como Morales y, según fuentes partidarias, hasta el propio Manes.

En la UCR consideran que empezaron a recuperar el protagonismo perdido durante años a partir de su incorporación a Juntos por el Cambio pero, especialmente, con la renovación generacional que encarnan figuras como Abad y Lousteau, que no le huyen al debate y la competencia interna tanto en el partido como en la coalición.

"Hay ambición de poder", describió entusiasmado un operador radical consultado por Noticias Argentinas que destacó el "empuje" y el nuevo protagonismo que le dieron al partido las peleas libradas por ellos y Manes, entre otros.

El acto de este jueves será además una oportunidad para reivindicar nuevamente al ex presidente Raúl Alfonsín, dado que el 30 de octubre es el aniversario de su triunfo en las elecciones de 1983 que lo consagraron como el primer jefe de Estado de la democracia tras la dictadura iniciada en 1976.

Por esa razón, la UCR mostrará "simbolismo alfonsinista" combinado con una "estética moderna" que busca resaltar la renovación radical.