Los senadores de Unión por la Patria, seguidores fieles de Cristina Kirchner, especularon ayer hasta última hora con la posibilidad de que el senador Martín Lousteau y su bloque de radicales no dieran quórum para el debate de la Ley Base.

Pero Lousteau permitió la discusión legislativa a partir de que presentó un dictamen propio que hasta la madrugada intentó conseguir dos artículos para garantizar financiamiento educativo.

Entre los cambios propuestos se destaca la eliminación de facultades excepcionales al presidente Javier Milei y la protección de ciertos organismos estatales

Además, Lousteau enfatizó la necesidad de recomponer jubilaciones, por lo que la posición del senador porteño generó diferencias con el oficialismo durante toda la sesión y alteró la estrategia del kirchnerismo que apostó a que la sesión caiga.

En más de una oportunidad hubo empate en la votación y fue la vicepresidenta Victoria Villarruel, la encargada del desempate.

Javier Milei, un crítico de Lousteau, deberá observar el rol institucional de legisladores en el marco de los debates parlamentarios.